Gingrich propone a Aznar una cumbre entre Europa y Estados Unidos sobre Cuba
Cuba sigue siendo una espina clavada en el pie de Estados Unidos y en las relaciones con sus aliados. El presidente del Gobierno español, José María Aznar, pudo comprobarlo en su visita al Congreso de Estados Unidos, el jueves por la tarde, en las últimas horas de su primer viaje oficial a este país. Newt Gingrich, presidente de la Cámara de Representantes y líder del partido republicano, con mayoría en las dos cámaras del congreso, le propuso la celebración de una cumbre entre Europa y Estados Unidos sobre Cuba ante las diferencias de criterio que existen entre ambas partes.
Aznar, que criticó con total claridad la ley Helms-Burton durante su visita a Washington, pudo comprobar en su entrevista con Gingrich, como lo había hecho antes en su reunión con congresistas hispanos, que el Partido Republicano no está dispuesto a aliviar la presión sobre el régimen de Fidel Castro. El compromiso alcanzado el pasado mes de marzo entre la Casa Blanca y la Unión Europea para buscar una salida al conflicto internacional que plantea el caracter extraterritorial de la ley nortamericana Helms-Burton no parece que vaya a tener el imprescindible respaldo del Congreso norteamericano.El acuerdo contempla la suspensión de la demanda europea contra Estados Unidos ante la Organización Mundial de Comercio, con la condición de que será presentada de nuevo si no se consigue un acuerdo definitivo antes del próximo 15 de octubre. El presidente Clinton, que abordó el tema de la ley Helms-Burton en la entrevista, seguida de un almuerzo, que mantuvo el miércoles con Aznar en la Casa Blanca, busca un acuerdo con la mayoría republicana basado en una modificación de la polémica ley que satisfaga a la UE, a cambio de que los Gobiernos europeos desanimen las inversiones privadas en Cuba.El presidente español, en la conferencia de. prensa en la que hizo un balance de su visita, criticó la ley Helms-Burton no porque fuera una ley contra el régimen cubano, sino por su caracter extraterritorial, es decir por la aplicación de la ley norteamericana contra personas o empresas extranjeras por actividades que realizan fuera del territorio norteamericano. Aznar señaló que la ley no sólo era un mal instrumento para alcanzar sus objetivos, sino que abría una brecha entre dos buenos aliados.
La mayoría republicana que controla el Senado y la Cámara de Representantes parece menos preocupada por el derecho internacional que por Cuba. El exilio cubano es poderoso políticamente en Estados Unidos por su presencia no sólo en Florida sino en New Jersey, y sus posiciones están lejos de ablandarse. lleana Ros-Lehtinen, congresista republicana por Florida, así se lo expresó a Aznar en la reunión que mantuvo con congresistas hispanos. Nacida en Cuba y elegida en 1998, su circunscripción incluye las áreas de más densa población cubano-norteamericana del centro de Miami. Su hegemonía es tal, que en las dos últimas elecciones fue elegida sin votación, al no haber candidato demócrata.
Ros-Lehtinen le dijo al presidente del Gobierno español que no hay ninguna posibilidad de que el Congreso acepte la suavización de los aspectos relacionados con empresas extranjeras que ha pactado la Casa Blanca con la UE. Días atrás, el senador Jesse Helms, presidente del comité de Relaciones Exteriores del Senado y uno de los dos promotores de la ley, se había pronunciado en el mismo sentido.
En su visita a EE UU, Aznar ha conseguido que el encarcelamiento en Miami del empresario español Javier Ferreiro, acusado de exportar productos norteamericanos a Cuba en violación de la ley del embargo, no se convierta en un problema en sus relaciones con los norteamericanos. Aznar, que recibió en Nueva York a una hija del empresario, no abordó este asunto en sus conversaciones con Clinton. Fuentes diplomáticas han declarado durante este viaje que el mejor modo de ayudar a Ferreiro es no politizar su caso.
Las relaciones hispano-cubanas persiguen a Aznar como su sombra. Al igual que antes en Brasil, o en Argentina, varias de las preguntas efectuadas al presidente español el jueves en el Club Nacional de Prensa versaron sobre Cuba.
Por otro lado, Aznar, que ya está en Madrid, visitó ayer a su padre, Manuel Aznar, quien se encuentra en la clínica Ruber recuperándose de una operación de vesícula.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
- Newt Gingrich
- Ley Helms-Burton
- Viajes oficiales
- Aranceles
- Presidencia Gobierno
- Cuba
- Contactos oficiales
- José María Aznar
- Caribe
- Comercio internacional
- Política migratoria
- Comercio exterior
- Estados Unidos
- Política exterior
- Migración
- Demografía
- Turismo
- Comercio
- Gobierno
- América
- Administración Estado
- Administración pública
- Relaciones exteriores
- Política
- España