Holanda y Finlandia, declaradas economías "virtuosas"
La Comisión declaró a Holanda y Finlandia exentas del procedimiento de déficit excesivo. Han reducido en 1996 su déficit por debajo del 3% del PIB (Holanda, del 4% al 2,4%; Finlandia, del 5,1% al 2,6%). Y en cuanto a la deuda, Finlandia está por debajo del tope del 60%. Holanda lo supera (un 78,5% en 1996), pero ha decrecido desde 1996 y lo que importa es la tendencia. Ambos países engrosan así el club de los virtuosos, en el que estaban Luxemburgo, Irlanda y Dinamarca.Ello ha sucedido a resultas de un ejercicio, el de 1996, en que el crecimiento de la economía europea fue débil, del 1,6%, frente al' 2,4% del año anterior, aunque en el segundo semestre se alegró. "Se confirma la recuperación económica", dijo el comisario de Asuntos Monetarios, Yves-Thibault de Silguy, al Parlamento Europeo. La previsión para 1997 se cifra en el 2,4%.
Pese a ese optimismo, el empleo no despega, reconoció. En 1997 se crearán 700.000 empleos, pero dada la progresión de la población activa, el paro sólo bajará una décima respecto de 1996, situándose en el 10,7% de las personas en edad de trabajar, por lo que la Comisión insistió en sus recetas de siempre: más crecimiento, dentro de rígidos corsés presupuestarios, reformas estructurales y moderación salarial.
La inflación bajó del 3% en 1995 al 2,7% en 1996 y descenderá al 2,2% en 1997, de modo que 14 países (todos, salvo Grecia) cumplirán ese criterio (umbral de 1,5 puntos más que la media de los tres mejores). La deuda de los Quince empeoró dos puntos de 1995 a 1996, pero para este año se prevé que descienda, algo inédito desde los años ochenta.
Y todos los socios, salvo Alemania, redujeron su déficit: trece países (todos, salvo Italia y Grecia) cumplirán este criterio. De Silguy recordó que el 3% "es un límite, no un objetivo", y que apretarse el cinturón presupuestario no equivale necesariamente a generar paro, "pues el déficit de Estados Unidos fue del 1%" [en realidad, del 1,9%] y no impidió crear empleo, sino al contrario".
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