Una embarazada, rechazada como agente de igualdad de oportunidades

Cuando Rosa Godoy Godoy, psicóloga de 32 años, envió su curriculum para trabajar como agente para la igualdad de oportunidades de la mujer del ayuntamiento de Málaga, no imaginaba que sufriría la discriminación en sus carnes. Corría el mes de febrero y en la empresa de trabajo temporal encargada de hacer la selección de personal nadie advirtió que estaba embarazada de cuatro meses.

Con formación especifica en temas de igualdad y contratos anteriores con el municipio, Rosa Godoy pasó sin problemas la preselección hecha por la empresa Eulen. Cuando llegó la hora del test psicotécnico su embarazo era evidente y le dijeron que no sabían si podrían hacerle el contrato. El trabajo era para cuatro meses: del 10 de marzo al 9 de julio. La gestación de Rosa cumple justamente el 10 de julio. "Propuse un contrato de tres meses, yo misma me discriminé. Me preguntaron si sería capaz de aguantar hasta el final, o algo así. Me ofusqué. Consultaron a recursos humanos, pero al final me contestaron que tampoco podían contratarme por tres meses porque estaba embarazada y no podían garantizar el servicio".Rosa quedó fuera de la lista pese a que su nombre había llegado a barajarse para coordinadora."Indignada", comunicó los argumentos dados por la empresa a la Delegación Municipal de la Mujer, para la que Eulen hacía la selección. "Allí me dijeron que me tranquilizara, que ahora lo importante era mi hija. Mi hija no deja de ser importante para mí porque yo luche por mis derechos".

El comité de empresa del ayuntamiento y la secretaría de la mujer de CCOO respaldan a Rosa y esta semana pondrán una denuncia en la Inspección de Trabajo. La psicóloga además ha presentado alegaciones a la concejalía de Asuntos Sociales y a la alcaldesa, Celia Villalobos. El ayuntamiento se excusa: "La selección la hizo una empresa privada; ahí no podemos hacer nada", dice una portavoz municipal. Eulen rechaza que haya habido discriminación. "Simplemente se eligieron las 11 profesionales más idóneas entre una treintena de aspirantes", aseguró la empleada a la que Rosa propuso que le hicieran un contrato más corto. "Me siento humillada como persona, como mujer y como madre; mi hija está siendo discriminada desde antes de nacer", se queja Rosa.

Las agentes para la igualdad de oportunidades de la mujer comenzaron a trabajar en marzo y continuarán su labor de sensibilización para la no discriminación hasta el 9 de julio. El 10, según cálculos de los médicos, nacerá la hija de Rosa.