La II Conferencia Mediterránea termina sin declaración final
La II Conferencia Euro-Mediterránea terminó ayer en La Valeta sin declaración final, para desesperación de la Comisión Europea que la preparó durante varios meses, y tendrá que ser un grupo de expertos el que acabe de ponerla a punto en los próximos días, según anunció el presidente de turno de la UE, el ministro holandés de Asuntos Exteriores, Hans Van Mierlo."La Conferencia ha sido un éxito -aseguró Van Mierlo en la clausura- siempre que no la valoren ustedes en términos de comunicado final". El ministro explicó que no había sido posible finalizar el texto "por problemas políticos sobre la medida en que debía quedar reflejado la situación del proceso de paz en Oriente Próximo". Según Van Mierlo, después de la entrevista Arafat-Levy, el tema se desbloqueó y se llegó a un "acuerdo político", pero ya era demasiado tarde para que los expertos lo perfilaran y los 27 ministros presentes pudieran dar su visto bueno.
Durante toda la Conferencia, el bloque árabe insistió en la necesidad de incluir un párrafo que suponía una condena a la política de "hechos consumados" israelí, algo a lo que se oponían europeos e israelíes. El encuentro Arafat-Levy pareció suavizar la posición árabe y fuentes comunitarias aseguraron que existía acuerdo para "expresar una profunda inquietud ante los obstáculos que bloquean el proceso de paz" y "subrayar la necesidad de un acuerdo justo" global y duradero en el cuadro de los acuerdos de Madrid de 199l".
Según fuentes comunitarias, el consenso llegó demasiado tarde para poder desbloquear otros apartados, que habían quedado supeditados al primero. Se trata, entre otros, de la lista de posibles medidas de confianza en la zona, que debía llevar a una Carta de Paz y Estabilidad, pospuesta ahora sin fecha. En el capítulo económico, tampoco se desbloquearon párrafos relativos a la marcha de los acuerdos de asociación UE-países de la ribera sur, y la distribución de los fondos MEDA, entre otras cosas.
