Aznar echa, en cara al PSOE sus diferencias sobre el Concierto Económico vasco

El presidente del Gobierno, José María Aznar, aprovechó ayer la baza que le brindó una pregunta del PSOE sobre el acuerdo en torno al Concierto Económico vasco para sacar a relucir las divisiones socialistas. Juan Manuel Eguiagaray preguntó a Aznar en el pleno del Congreso por las bases del compromiso. Y éste le respondió: "Los representantes del PSOE en el Gobierno vasco debían conocer el tema". Y apostilló: "Sería deseable, algo es algo, que previamente ustedes se pusieran de acuerdo entre ustedes mismos".

Es sabido que los socialistas vascos han pedido a los órganos centrales del PSOE que apoyen el acuerdo de Gobierno y PNV sobre el Concierto Económico en Euskadi. Aznar no desaprovechó la oportunidad de explotarlo. Eguiagaray comenzó con ironía y pasó al ataque directo: "Parece que han bastado cuatro gritos del señor Arzalluz en París y en Bilbao para que usted ceda". "Parece", añadió, "que su ministro de Economía va diciendo por ahí que no está de acuerdo con lo que usted ha negociado" y también que "se ha excluido nada menos que al artífice, a uno de los responsables de un elemento importante de la política de este país como es la política contra el terrorismo, al ministro del Interior", de esas negociaciones. Todo eso, para Eguiagaray, "se llama pasar por el aro".El diputado socialista había hecho dos menciones implícitas: una, a las protestas y críticas del presidente del PNV, Xabier Arzalluz, antes de su entrevista con Aznar en la que. se cerró el acuerdo del cupo; y otra, a cuando el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, aseguró que ellos habían hecho "pasar por el aro" al PSOE y tendrán que hacerlo también con el PP.

Aznar recogió el guante y se refirió, sin citarle, a Felipe González. "Algunos de ustedes", dijo, "haciendo gala de ese estado de ansiedad que últimamente les acompaña, en cuanto leyeron alguna noticia sobre la posibilidad de acuerdo, destaparon la caja de los truenos". Y recordó a Eguiagaray: "Sus propios compañeros en el País Vasco les han llamado la atención, y ahora tienen que rectificar y que no se les note mucho".

Pacto sobre el empleo

El resto de la tarde fue aún más fácil para Aznar, ya que pudo dejar constancia en el diario de sesiones del éxito que al Gobierno le corresponde por el pacto sobre la reforma del mercado laboral. Lo hizo felicitando "a los interlocutores empresariales y sindicales que han conseguido el acuerdo", reconociendo "su esfuerzo y su capacidad de compromiso ante la sociedad española" y significando, "la trascendencia de un acuerdo dentro y fuera de España, pero que dentro de España, especialmente, tiene relevancia paral a creación de empleo". No olvidó decir que "el Gobierno ha respaldado ese proceso de negociación, está satisfecho de que se haya llegado a un acuerdo y desearía ahora el mayor consenso parlamentario".José Luis Centella Gómez, de IU, se dirigió a Aznar en tono agresivo para preguntarle por la reforma del aceite de oliva que pretende la UE, le acusó de estar escondido durante la reciente visita del comisario de Agricultura, Franz Fischler, y le lanzó un reto: "Si usted no sitúa el debate [en la mesa de los jefes de Estado y de Gobierno] estará empezando a ser cómplice de la reforma qué pretende el comisario Fischler". Aznar le replicó que no iba a cometer la "ingenuidad" de adelantar las medidas que España piensa adoptar en este terreno porque no se pueden descubrir en pleno proceso negociador.