Agricultura investiga un fraude de 6.000 millones en el algodón

El Ministerio de Agricultura, ante las denuncias planteadas por las propias organizaciones agrarias y las industrias desmotadoras, tiene en marcha una investigación para descubrir y, penalizar un fraude en la ayudas en el cultivo de algodón que se podrían situar en unos 6.000 millones de pesetas. La Administración ha analizado ya las declaraciones de más de 2.000 agricultores relacionados con este sector, fundamentalmente en Córdoba y Sevilla. Hace ya cuatro años, el Tribunal de Cuentas de la Unión Europea ya advirtió sobre la necesidad de perfeccionar los sistemas de control de las superficies.El origen de este fraude en la actual campaña, que al parecer no es nuevo, tiene sus raíces en el cultivo del algodón con una cuota de producción nacional de 249.000 toneladas con derecho a ayuda y a pleno precio. En la última campaña, según los datos manejados por el sector y la propia Administración, se esperaba una superficie de 79.000 hectáreas con una producción total de 264.000 toneladas, lo que suponía una penalización en los precios del 3,1%. Basándose en estas previsiones, la, industria desmotadora hizo las liquidaciones a miles de agricultores, dinero que en este momento tiene una dificil recuperación.

Sin embargo, ante la sorpresa de prácticamente todo el sector, se constató que la producción no era de 264.000, sino de 306.000 toneladas y que la penalización en los precios debía ser no del 3,1%, sino del 11,45%, equivalente a, una reducción de unas 20 pesetas por kilo.

Fuera de toda lógica

Esta situación se podía deber solamente a dos razones. La primera que, sorprendentemente, los rendimientos por hectárea hubieran pasado de una media de 3.350 a 3.850 kilos, posibilidad fuera de toda lógica. La segunda razón, por donde se han encaminado las investigaciones, es que, entre unas 10.000 y 15.000 hectáreas de tierras de regadío declaradas para siembra y perceptoras de la ayuda por el cultivo de girasol, se hayan dedicado en realidad, ilegalmente, a la siembra de algodón percibiendo ayuda duplicada.Según denuncia el propio sector, entre 10.000 y 15.000 hectáreas de girasol, han recibido una subvención ilegal elevada, superior a las 50.000 pesetas por hectárea. Además han contribuido a la penalización del 25% de las ayudas que han tenido todos los cultivadores de herbáceos en regadío de toda España al superarse las superficies asignadas por Bruselas.

Para el resto de los cultivadores de algodón, la siembra ilegal de estas miles de hectáreas ha significado una penalización de 20 pesetas por kilo. Esta cantidad, en unos casos, no ha sido cobrada por el agricultor. En otros, la ha pagado por adelantado la industria que ve ahora difícil su recuperación, dando lugar a fuertes problemas financieros en muchas cooperativas algodoneras.