_
_
_
_

Una víctima del incendio del estadio de Sheffield recupera la conciencia tras ocho años en coma

Andrew Devine responde a estímulos presionando un sensor

El regreso de un paciente a un leve estado de conciencia, tras ocho años de vida vegetativa, reavivó ayer en el Reino Unido la polémica sobre el derecho a morir de los enfermos en esta situación. El caso de Andrew Devine, de 30 años, que tras ser diagnosticado como irreversible, responde a estímulos presionando un sensor, contiene ingredientes como para sentar un nuevo precedente médico. Devine, víctima del incendio del estadio de HilIsboroug, en Sheffield, donde murieron aplastados 95 hinchas del Liverpool en 1989, reside en Liverpool con su padres.

La víctima número 96 del incendio y avalancha del estadio de Hillsborough, Tony Bland murió en 1993, en la cama de un hospital una vez que sus padres lograron la luz verde de la máxima instancia judicial británica, la Cámara de los Lores, para interrumpir la alimentación artificial y la respiración asistida de su hijo.Este amargo precedente no hizo flaquear a los padres de Andrew Devine cuyo proceso de recuperación, desde el "estado vegetativo que le fue diagnosticado, se produjo hace cinco años", según el comunicado difundido ayer por sus padres.

Mínima comunicación

Robin Makin, abogado de la familia Devine, señaló ayer al leer el breve texto donde se da cuenta de la evolución de Andrew Devine, que el enfermo es capaz de un mínimo nivel de comunicación con el exterior, pulsando un sensor especialmente diseñado en el hospital, una sola vez para responder Sí, dos veces para responder No".Igual que el caso de Tony Bland marcó en 1993 un precedente para los partidarios de acabar humanitariamente con la vida de los enfermos en estado de coma irreversible, el de Andrew Devine puede marcar un retroceso en esta tendencia, estableciendo una nueva cautela médica en la definición de lo que se conoce como Estado Vegetativo Permanente o PVS (siglas en inglés). Hasta marzo del año pasado el Colegio de Médicos británico no estableció los criterios que definen este estado. Básicamente, lo que la profesión médica describe en este país como PVS es un estado en el que el paciente no mueve los ojos ni da ninguna muestra significativa de comunicación o respuesta.

La respiración del enfermo no necesariamente tiene que ser asistida, pero éste debe ser incapaz de tragar saliva y haber permanecido así un año. Ayer una portavoz del Colegio de Médicos minimizó el impacto de la recuperación de Devine señalando que su estado, "fue diagnosticado mucho antes de que el colegio definiera los síntomas del PVS". La semana pasada, la familia de una joven de 29 años, en coma aunque no en estado vegetativo permanente, fue autorizada por el juez -la justicia británica decide sobre cada caso- a pedir que se interrumpa su alimentación artificial para morir en paz.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_