Rajoy dice que los gobernadores civiles desaparecerán a mediados de abril

Los nacionalistas catalanes y vascos expresaron ayer su temor a que los gobernadores civiles no desaparezcan y permanezcan englobados en la nueva figura de los subdelegados del Gobierno. Fue esta la opinión que ayer manifestaron la portavoz de CiU en la Comisión de Administraciones Públicas del Congreso, Carme Gil, y la del PNV, Margarita Uría. El ministro de Administraciones Públicas, Mariano Rajoy, anunció en la comisión el calendario de puesta en marcha de la Ley de Organización y Funcionamiento de la Administración del Estado (Lofage), aprobada la pasada semana en las Cortes, y anunció que la antigua figura del gobernador civil desaparecerá a mediados de abril.La portavoz de CiU expresó su temor a que "un cargo incoloro como el subdelegado del Gobierno" se convierta "en una especie de ectoplasma del gobernador civil". A su juicio, no quedan claras las competencias de la nueva figura del subdelegado, sustitutoria de los gobernadores civiles. Según el ministro, el subdelegado se limitará a ser un funcionario con categoría de subdirector general y colaborador técnico del delegado del Gobierno, que será el responsiable del Estado en la comunidad autónoma.

Rajoy añadió que el subdelegado se limitará a dirigir los servicios integrados en la provincia, las Fuerzas de Seguridad del Estado donde no radique la sede del delegado del Gobierno, excepto donde exista policía autonómica. Pero dejó abierta la posibilidad de asumir competencias por delegación desde el delegado de Gobierno. Es ahí donde los nacionalistas catalanes y vascos temen que se abra la espita para que la nueva figura del subdelegado tenga el mismo poder que el antiguo gobernador civil.

Rajoy hizo público el calendario de la reforma de la administración periférica del Estado recogida, en la Lofage. La primera fase se inicia a mediados de abril con la desaparición definitiva de la figura de los gobernadores civiles, que serán sustituidos por los subdelegados del Gobierno. Éstos serán nombrados en mayo.

Fases

En una fase posterior, que se iniciará en octubre, se producirá la integración de los servicios periféricos de la Administración del Estado, que afectará a 150 unidades de seis ministerios y 9.500 funcionarios. Una segunda fase, a comienzos de 1998, abordará la parte más compleja de la reforma de la Administración. En ella están incluidos los ministerios de Administraciones Públicas, Economía, Educación y Cultura, Fomento, Justicia, Medio Ambiente y Trabajo. Quedan fuera del roceso de integración las organizaciones que, por su volumen de gestión no resultan eficientes, a juicio del Gobierno, esto es, la Agencia Tributaria, la Seguridad Social y Correos y Telégrafos.El ministro pidió prudencia en la puesta en marcha de la reforma de la administración periférica y contó, en este punto, con el apoyo del portavoz del PSOE en la comisión, José Luis Rodríguez Zapatero.