La negativa de EE UU a que intervenga la OTAN deja a la OSCE como única salida

La "radical oposición de Estados Unidos" a una intervención de la OTAN en la crisis albanesa ha dejado a la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) como casi único foro internacional para controlar el caos en la república surbalcánica, informan fuentes diplomáticas en Bruselas.Así, prácticamente todas las diplomacias confirman que descartan por el momento toda operación que vaya más allá de la cobertura de una evacuación. La propuesta de Alemania y Reino Unido por crear una zona de seguridad o plataforma desde la que el delegado de la OSCE, Franz Vranitzky, pueda mediar, se discutirá hoy por la propia organización en Viena y por los ministros de Exteriores de la Unión Europea (UE) en Holanda. Pero esa plataforma, aunque naval, ha empezado ya a existir, desde la fragata italiana Aliseo, donde el ex canciller austriaco y 10 colaboradores se entrevistaron con el primer ministro Bashkim Fino, líderes de los rebeldes y responsables de los comités locales.

Estados Unidos, por su parte, suspendió ayer las operaciones militares de evacuación de sus ciudadanos en Albania después de que dos helicópteros de su Marina escaparan a ataques efectuados desde tierra. William Cohen, secretario de Defensa, informó en Washington que la evacuación se daba por terminada hasta que los responsables militares estadounidenses presentes en Albania no vuelvan a dar su luz verde.

Cohen reiteró ayer que EE UU no considera otra intervención de Albania que la de rescatar a sus ciudadanos. "Nuestro único objetivo es sacar a los norteamericanos de ahí de un modo que preserve sus vidas y las de aquellos que los rescaten", dijo. El secretario de Defensa añadió que Washington " sigue de muy cerca" y "en permanente contacto" con sus aliados la situación en Albania, y que apoya los esfuerzos diplomáticos europeos para intentar restaurar el orden en ese país.

Inhibición vigilante

Pese a la mayor implicación de Italia y Grecia -por vecindad- y Holanda -que ostenta la presidencia semestral de la UE-, la inhibición estadounidense se refleja en sus socios. El canciller Helmut Kohl declaró en La Haya que el conflicto es en gran medida "un asunto interno".La estrategia de inhibición vigilante fue ayer asumida también por el consejo de la UEO. Nadie sabe cómo se debería intervenir en una guerra civil que es, sobre todo, una revuelta anárquica. Pero todos saben también que la inacción puede resultar aún peor, por el peligro de contagio hacia las minorías albanesas en Kosovo, Grecia y Fyrom, la ex república yugoslava de Macedonia. La OSCE y la UE tratarán hoy de cuadrar ese círculo.

"Ahora corresponde a la OSCE examinar la situación y a los Gobiernos implicados el tomar una decisión en los próximos días", declaró Vranitzky tras afirmar que el conjunto de los albaneses desea una intervención internacional, incluidos "los comités de ciudadanos".