España acepta cerrar los astilleros inviables en 1999 para lograr ayudas de la UE
El Gobierno español se ha comprometido formalmente a cerrar los astilleros que no sean rentables al acabar 1998. El compromiso español permitirá desbloquear, casi con seguridad, el próximo miércoles las ayudas públicas de 135.000 millones de pesetas que, de momento, están bloqueadas por el ejecutivo comunitario.Altos funcionarios de la C omisión Europea y de los Estados afectados llegaron a un acuerdo de principio ayer para autorizar las ayudas pendientes a los astilleros de España, Alemania (por 728 millones de marcos, equivalentes a 62.000 millones de pesetas) y Grecia (54.225 millones de dracmas, equivalentes a 30.000 millones de pesetas). El acuerdo debe ser ratificado el lunes por los jefes de gabinete de la Comisión y aprobado el próximo miércoles por el Colegio de Comisarios.
En el caso español, el acuerdo sólo ha sido posible después del compromiso del ministro de Industria, Josep Piqué, de proceder al cierre de las instalaciones que no sean rentables a partir del 31de diciembre de 1998. A cambio, ha logrado que las ayudas sean liberadas sin que se recorten las plantillas, salvo en algunos casos puntuales. Bruselas insistía en que no bastaba con recortar la producción, sino, que era necesario también podar las plantillas.
Finalmente, la producción se deberá recortar en 47.500 toneladas, de las que 30.000 corresponden al sector público y 17.500 al privado. España podrá así otorgar ayudas públicas por valor de 135.028 millones de pesetas, de las que unos 45.000 millones corresponden a partidas todavía no liberadas de 1989 y 1991. De este total, 62.028 millones son para el pago de intereses por préstamos concedidos entre 1988 y 1994; 58.000 millones corresponden a créditos fiscales del periodo 1995-1999 y 15.000 millones para inyectar capital este año.
En conjunto, las ayudas que habrá recibido el sector naval español en el plan de reconversión se elevan a 318.112 millones de pesetas, de los que 183.084 ya han sido desembolsados y el resto forma parte de lo que será aprobado por la Comisión Europea la próxima semana.
Bruselas y España han llegado también a un acuerdo sobre el conflicto planteado por el Reino Unido en relación a las plataformas móviles de Astano. El Gobierno ha aceptado que a partir de ahora todas las plataformas de Astano sean fijas.
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