Grupos humanitarios denuncian que Rusia extradita a disidentes de países de la CEI
Varias organizaciones de defensa de los derechos humanos denunciaron ayer a las autoridades rusas por permitir la extradición de disidentes políticos perseguidos en países de la Comunidad de Estados Independientes (CEI) con dudosas credenciales democráticas y dejar que los servicios secretos de estos países actúen libremente en territorio de Rusia.En una rueda de prensa celebrada ayer, representantes de la organización Memorial, la fundación Glásnost, el grupo de vigilancia de Helsinki y el PenClub ruso se manifestaron contra la extradición a Uzbekistán del periodista Albert Musin, detenido en Moscú el 21 de febrero y confinado desde entonces en un calabozo de la capital rusa.
Según la policía moscovita, Uzbekistán ha solicitado la extradición de Musin, al que se acusa de un delito común. El régimen de Tashkent, sin embargo, ha dado marcha atrás en su petición, como confirmó ayer un funcionario de la Embajada uzbeka en Moscú, según el cual toda la situación obedece a un malentendido y a la circulación de datos caducados en el sistema informático policial común.
Los defensores de los derechos, humanos manifestaron que la práctica de extraditar a activistas políticos de países ex soviéticos está muy extendida en Rusia, cuya legislación no da cabida a la categoría de "refugiado político". En 1993, Rusia firmó con los países de la CEI un acuerdo para la extradición de delincuentes comunes, que, según los organizadores de la conferencia de prensa, se utiliza para entregar los servicios secretos de los países ex soviéticos a activistas políticos.
En los últimos años, entre veinte y treinta perseguidos políticos han sido entregados desde un Estado postsoviético a otro. En 1996, fueron arrestados en Moscú dos miembros de la oposición al presidente de Azerbaiyán, Gueidar Alíev. Uno de ellos, Ragim Kasiev, condenado a muerte, fue extraditado y hoy está en prisión y puede ser ejecutado en cualquier momento.
La convención de extradición entre Estados de la CEI transgrede diversas normas de derecho internacional y los documentos firmados por Rusia para ingresar en el Consejo de Europa.
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