_
_
_
_

Simpson, considerado "responsable" del doble asesinato por el que fue absuelto hace un año

El ex jugador deberá pagar 1.150 millones de pesetas a los herederos de los fallecidos

, ¿Cómo se puede ser a la vez "no culpable" y "responsable" de un doble asesinato? ¿De dónde sacará O. J. Simpson los 1.150 millones de pesetas para pagar a las familias de las víctimas? ¿Se puede soldar la fisura entre blancos y negros abierta por el caso? ¿Ha terminado ya el culebrón que más apasiona a los norteamericanos? Estados Unidos daba ayer mil vueltas a esas preguntas, después de que un jurado de mayoría blanca declarara a Simpson "responsable" del asesinato de su ex esposa Nicole Brown Simpson y de Ronald Goldman, un amigo de ella.Qué noche la del pasado martes; qué gran noche de televisión en directo y de democracia en funcionamiento; una de ésas en las que uno se reconcilia con el planeta americano. Las grandes cadenas generalistas pasaron de deportes, películas o tertulias; no los necesitaban para tener audiencias millonarias fascinadas ante los televisores: podían cubrir simultáneamente el discurso anual de Bill Clinton sobre el estado de la Unión y el veredicto del segundo juicio del caso O. J. Simpson.

A la segunda fue la vencida Simpson fue declarado responsable del doble asesinato cometido en la noche del 12 de junio de 1994, de Nicole Brown Simpson y Ronald Goldman Tras seis días de deliberaciones, los doces miembros del jurado adoptaron por unanimidad ese veredicto. Después de que el pasado viernes el juez expulsara del jurado a la mujer que era su único miembro negro, ese organismo había quedado compuesto por seis hombres y seis mujeres: nueve blancos, un hispano, un asiático y un mestizo. Eso pesó como plomo en la decisión.

Indemnización

Simpson, que escuchó impávido el veredicto, no irá a la cárcel. Dado que este segundo juicio de la ex estrella negra del fútbol norteamericano ha seguido el procedimiento civil, sigue siendo dueño de sus movimientos, aunque, eso sí, tendrá que desembolsar una fuerte indemnización económica a los familiares de las víctimas: 8,5 millones de dólares (unos 1.150 millones de pesetas) a los padres y hermanos de Ronald Goldman y una cantidad que se determinará los próximos días a los herederos de Nicole Brown Simpson, los hijos del propio condenado.

El veredicto de Santa Mónica contradice el adoptado en octubre de 1995 por un jurado mayoritariamente negro de Los Ángeles, tras ocho meses de un juicio seguido por el procedimiento criminal. Entonces Simpson fue proclamado inocente.

Estimada en 11 millones de dólares hace cuatro años, la fortuna de Simpson ha sido diezmada por los elevadísimos costos de los equipos de abogados de sus dos juicios. Una investigación de CNN y Time la sitúa ahora en algo más de 3 millones de dólares, la mayoría invertidos en intocables fondos de pensiones. A sus 49 años, Simpson tendrá que subastar su automóvil Bentley. Pero no se verá forzado a mendigar.

Va a ser difícil que alguna empresa quiera contratarle para hacer publicidad de sus productos, pero no le van a faltar ofertas para dar conferencias y participar en espectáculos televisivos. De hecho, ya tiene sobre su mesa propuestas de contratos millonarios para un libro y una película.

"Por fin se ha hecho justicia con Ron y Nicole", decía llorando Fred Goldman, el padre que no renunció a perseguir a Simpson aunque ya hubiera sido declarado inocente. Explotando una paradoja del sistema judicial, Fred Goldman ha logrado algo no muy habitual en este país: una sentencia contraría en un juicio civil para alguien que ha sido absuelto en un juicio criminal previo.

La policía de Los Ángeles estaba ayer en estado de máxima alerta en previsión de las reacciones violentas que el veredicto pudiera provocar entre los negros de la gigantesca metrópolis californiana.

En las cuatro esquinas del país muchos blancos expresaban su alivio, muchos negros manifestaban su amargura. "¡Es una barbaridad!", gritaba ante las cámaras de televisión Rudy Battle, un albañil negro del barrio neoyorquino de Harlem. "¡No han parado hasta condenarle! ¡Sin ningún testigo, ni uno solo!".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_