Buena acogida de Kohl al plan de Aznar para impulsar las relaciones hispanogermanas

La 12ª cumbre hispano-alemana más numerosa (22 ministros) y más breve (unas seis horas) concluyó ayer en Bonn con el anuncio de in plan para reforzar la cooperación entre los dos países. Ni el canciller germano, Helmut Kohl, ni su homólogo español, José María Aznar, concretaron avances sobre los grandes temas del futuro de Europa en la conferencia de prensa final, pero sí se anunció la presentación, por España, de un plan de acción estable para impulsar la relación de los dos países en el marco europeo. Kohl, que acogió con buenas palabras la propuesta, declaró que, a mediados de julio, los Reyes visitarán Alemania, como ejemplo palpable del buen momento que atraviesan las relaciones entre ambos países.

El presidente del Gobierno español, que había confesado repetidamente a la prensa alemana que su máxima prioridad es el ingreso en el núcleo inicial de la moneda única, reiteró que el compromiso de España con Europa es "irreversible".A fin de despejar las dudas que existen en Alemania sobre el futuro de las economías del sur de Europa, Aznar tuvo especial interés en recalcar el compromiso de su Gobierno con la "estabilidad" del euro, la futura moneda única de la UE.

Se trata, por tanto, no ya de discutir si se alcanzan los criterios fijados en el tratado de Maastricht para entrar en el club fundador del euro, sino de dar garantías a los mercados de que se mantendrá la austeridad después del ingreso en la moneda única.

Helmut Kohl intentó despejar las dudas sobre la existencia de un pacto entre Francia y Alemania para seleccionar qué países formarán el núcleo inicial de la unión económica y monetaria. "Estarán los países", dijo el canciller, "que hagan los deberes, y nosotros los alemanes lo que tenemos que hacer es cumplir con nuestros deberes domésticos. Por lo demás me niego a entrar en especulaciones o jugar a profeta". Kohl se puso didáctico al asegurar que esos deberes, es decir, el cumplimiento de las condiciones fijadas en el tratado de Maastricht, "son como los que se deben hacer en el colegio que, si se cumplen, se premia a los estudiantes".

Por la senda del euro

El canciller alemán, al que se preguntó por las posibilidades de que España ingrese en el grupo inicial del euro, tuvo palabras de elogio a "los enormes esfuerzos realizados bajo la presidencia de José María Aznar para caminar por la senda hacia la unión monetaria". Eso sí, matizó: "Yo no puedo hablar ex catedra como el Papa, y no somos los Estados miembros los que decidimos quienes van a acceder a la moneda única".Aznar también tuvo que responder a los recelos centroeuropeos, que consideran a España reticente ante la próxima ampliación al Este de la Unión Europea. El presidente del Gobierno español reiteró que no existen esos recelos, aunque advirtió que ese proceso de negociación tendrá "su desarrollo y sus plazos"

El plan de acción estable propuesto por España prevé intercambios culturales, exposiciones, becas, cooperación entre parlamentos e, incluso, coloquios entre periodistas de los dos países para reforzar la relación bilateral. Aznar llegó a calificar la relación hispano-alemana como uno de "los pilares básicos" de la política europea de España.

Este marco de cooperación y buen entendimiento quedó reflejado en las entrevistas mantenidas por los 11 ministros de cada país que asistieron a la cumbre. Según fuentes de la delegación española, en el marco de los ministerios de Interior se acordó incrementar ' la cooperación y la información en la lucha contra el crimen organizado, trata de blancas y narcotráfico.

Por su parte, la ministra de Justicia, Margarita Mariscal de Gante, apoyó la pretensión alemana de que se mejore el sistema de cooperación judicial cuando existan órdenes de búsqueda y captura. Ambos países acordaron también intercambiar oficiales de enlace para reforzar las fronteras exteriores de Europa. Los españoles estarán presentes en la frontera oriental de Alemania, mientras que los miembros, de la policía federal de fronteras germana cooperarán en la frontera sur de España.

El ministro de Defensa, Eduardo Serra, presente en Bonn, aseguró que la compra de los tanques alemanes Leopard se reanudará en abril, una vez que concluya la evaluación que el Gobierno efectúa sobre las capacidades de la industria militar española.

Según Serra, se intenta que crezca la participación" española en la construcción de los carros de combate, de tecnología totalmente alemana. "En el aspecto operativo y económico", señaló, "vamos a intentar ahorrar, y en el industrial vamos a intentar que aumente la participación".

En el ambiente de obligada cordialidad que implican la mayoría de las cumbres, los desacuerdos quedan en discreto segundo plano para no empañar la foto de familia.Según fuentes diplomáticas, se mantienen diferencias sobre temas importantes de la Conferencia Intergubernamental (CIG), que reformará profundamente la Unión Europea. Tampoco hay acuerdo sobre otro tema, menor aunque importante para Murcia y Bonn. Ambas ciudades aspiran a ser sede del instituto europeo sobre la desertificación, y ninguna de las dos está dispuesta a ceder el paso a la otra.