Último intento de los socialistas por formar Gobierno

El partido gobernante búlgaro intentó ayer en vano y a la desesperada obtener del presidente saliente Zheliu Zhelev, un conservador militantemente alérgico a los ex comunistas, el encargo de formar Gabinete. La patata caliente de la gravísima crisis que mantiene en vilo al país balcánico pasa ahora a manos de Petar Stoyanov, que jurará mañana su cargo como presidente durante los próximos cuatro anos, aunque no asumirá formalmente el cargo hasta el miércoles de la semana entrante.Zhelev ha cumplido su promesa de diciembre, a raíz de la dimisión del primer ministro Zhan Videnov, de impedir qué los desacreditados socia listas encabecen un nuevo Gobierno, alegando el peligro de explosión social. Como en. días anteriores, las calles de Sofía vivieron una manifestación multitudinaria. convocada por la coalición de oposición Unión de Fuerzas Democráticas pidiendo elecciones inmediatas.

El profesor de filosofía y antiguo disidente Zhelev, que, mantendrá consultas con la oposición conservadora antes de despedirse hoy -con más pena que gloria- de la primera magistratura del país, recibió a la plana mayor roja al día siguiente de que un sondeo, de opinión atribuyese a los socialistas un 8% de intención de voto, el porcentaje más bajo alcanzado nunca por el partido en el poder desde finales de 1994. Todavía a mediodía, el líder socialista Georgi Parvanov declaraba que los suyos esperaban un nuevo mandato del presidente saliente.

La dirección de los ex comunistas búlgaros se reunió con los principales embajadores acreditados en Sofía para reiterar su posición en favor de un Gobierno encabezado por el ministro del Interior Nikolai Dobrev, cuyos componentes estarían ya designados; y la celebración de comicios generales a finales de este año. En una carta difundida ayer, Simeón de Bulgaria responsabiliza a los socialistas del estado de cosas actual y pide a los dirigentes políticos un esfuerzo para alcanzar un rápido compromiso.

En lo que respecta a las relaciones con la oposición, que ayer se manifestó por undécimo día consecutivo en Sofía, Parvanov declaró que ya se han comprometido lo suficiente y que no piensan seguir cediendo.