José María Aznar promete "todo el apoyo necesario" de España

Desde su llegada, el sábado, a Guatemala, el jefe del Gobierno español, José María Aznar, ha querido dejar bien sentado que España seguirá contribuyendo al logro de la paz de este país. Ya en el mismo aeropuerto, despeinado por el fuerte viento reinan te, Aznar aseguró al presidente guatemalteco, Alvaro Arzú, que su país "prestará todo el apoyo necesario durante el proceso que seguirá a la firma de la paz". España es parte, junto a México, Venezuela, EE UU, Colombia y Noruega, del grupo de países amigos del proceso de paz, que desempeñó un papel decisivo a lo largo de los cinco años de negociaciones.Tras la recepción, Aznar acudió a la ciudad de Antigua, don de recorrió sus calles coloniales visitó algunos conventos y saludó a los lugareños. Ayer por la mañana recibió en la capital las llaves de la ciudad.

Pero la gran incógnita del evento fue, como es tradicional, la eventual llegada a Guatemala del presidente cubano, Fidel Castro. El misterio quedó resuelto a última hora: no apareció. Sí llegó su canciller, Roberto Robaina. Días antes, Cuba había enviado a una delegación de 50 personas para supervisar las condiciones de seguridad de la ceremonia.

El conservador Arzú invitó a Castro en contra de la opinión de la Iglesia y de EE UU, que recordaban el apoyo que el líder cuba no dio a la guerrilla durante 36 años de conflicto armado. El empeño de Arzú provocó la sustitución del vicepresidente estado unidense, Al Gore, por un funcionario de tercera fila como representante en la ceremonia. Hay quienes piensan que el, gesto del presidente guatemalteco es una forma elegante de invitar al viejo comandante a presenciar su derrota.