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PALEONTOLOGÍA: FAUNA DEL JURÁSICO Y DEL CRETÁCICO

Unos fósiles chinos cuestionan que las aves sean 'dinosaurios con plumas'

Dos yacimientos, uno en China y otro en España (el de Las Hoyas, en Cuenca) están revolucionando los conocimientos que se tienen sobre el origen de las aves. Los espñoles han encontrado interesantísimos especímenes y han definido hasta cuatro nuevos géneros (uno de ellos hallado en Lérida) de aves primitivas, de hace unos 115 millones de años. Ahora les toca el turno a los chinos -con colegas estadounidenses-, que dan a conocer en el último número de la revista Science su más reciente descubrimiento: un nuevo especimen bautizado como Liaoningornis.Sin embargo, la interpretación que hacen de su hallazgo Lianhai Hou, Zhonghe Zhou (de la Academia China de Ciencias), Larry Martin (Universidad de Kansas) y Alan Feduccia (Universidad de Carolina del Norte), anuncia una buena polémica entre los especialistas. Ellos apuntan nada más y nada menos que contra un concepto bien establecido entre los paleontólogos: que las aves son dinosaurios con plumas.

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Liaoningornis, dicen, tiene 140 millones de años y representa un grupo de aves que sería ancestral de las aves modernas, mientras que otros especímenes, como el Confuciusornis -del grupo de las enantiornitas y también descubierto en los fósiles chinos- y el célebre Archaeópteryx serían un callejón sin salida de la evolución, ya diferenciado de la rama que conduce a las aves actuales.

Es más, ellos afirman que ambos grupos tienen que descender de algún pariente común mucho más antiguo, anterior a los dinosaurios de los que, según los paleontólogos, descienden todas las aves. "Lianoingornis existió unos 76 millones de años antes que los dinosaurios, que, supuestamente, originaron a los pájaros modernos", dice Feduccia.

En primer lugar, la datación en 140 millones de años para los sedimentos del yacimiento chino ha sido cuestionada, como recuerda Ann Gibbons en Science. Pero las críticas a las hipótesis de los cuatro autores chinos y estadounidenses es mucho más profunda.

'Archaeópteryx'

Archaeópteryx y las aves actuaIes tienen un antecesor común próximo, sin que esto signifique que aquel animal con dientes, cola como de -lagarto y cuerpo de dinosaurio cubierto con plumas cuyo primer fósil se descubrió en Alemania en 1861 y que tiene unos 150 millones de años, sea antecesor directo de las aves actuales, explica José Luis Sanz, experto español y director del yacimiento de Las Hoyas."Pero las semejanzas entre Archaeópteryx y los dromeosaurios [los dinosauríos, carnívoros, emparentados más de cerca con las aves] son cada vez mas evidente, y son novedades evolutivas, no características arcaicas procedentes de antecesores comunes muy antiguos", comenta Sanz. Archaeópterys es una línea extinguida de la evolución, como otros grupos de aves primitivas, pero eso no invalida que pueda remontarse su origen, como el de las aves actuales, a unos dinosaurios.

"Recientemente se ha encontrado, también en China, un dinosaurio con plumas -aunque no volaba- lo cual va mucho más allá de las semejanzas esqueléticas", continúa; "todo. esto refuerza- notablemente la teoría del origen dinosauriano de las aves".

Los comentarios severos contra el equipo chino-estadounidense arrecian por todas partes. Mark Norell, del Museo Americano de Historia Natural (Nueva York) recuerda que la existencia de dinosaurios semejantes a aves del cretácico, hace unos 140 millones de años, deja una ventana relativamente amplia para la evolución hacia aves semejantes a dinosaurios. "Esos especímenes existen; si ellos quieren ignorarlos, allá ellos", ha declarado Norell a The Washignton Post.

"Feduccia y sus colegas llevan años intentando luchar contra la idea de que las aves son dinosaurios con plumas, negando toda la evidencia disponible",. recuerda Sanz.

Además, el equipo chino-esta-dounidense sugiere que los cuatro géneros de aves primitivas definidos por los especímenes españoles -tres de ellos del grupo de las enantiornitas- serían un único género. "Tienen diferencias muy notables en el esqueleto, en el esternón, la morfología vertebral... El rango de variabilidad es tan claro que no puede ser explicado por un único género", responde Sánz.

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