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El amante de lady Hazel.

Las negociaciones del tratado anglo-irlandés de 1921 se desarrollaron en Londres, y duraron un par de meses. Durante ese tiempo, Collins y los miembros de la delegación irlandesa que le acompañaban fueron alojados en dos casas del elegante barrio de Knightsbridge. Los periódicos británicos han recordado con detalle que en esos días el héroe nacional irlandés se olvidó en algún que otro momento de la gran causa para entregarse a placeres mundanos más comunes. En esa breve etapa, Michael Collins posó para el pintor John Lavery y tuvo tiempo para mantener además un intenso romance con la esposa del artista, lady Hazel Lavery, incidente eludido en el retrato épico de Jordan. La historia llegó lo bastante lejos como para que lady Hazel hubiera de ser disuadida casi por la fuerza de su intención de presentarse en el entierro de Collins vestida de riguroso luto. Tampoco el talento mortífero de Collins en la defensa de la independencia de Irlanda ha quedado intocado. Hace apenas una semana, otro periódico londinense publicó con carácter de exclusiva histórica la existencia de un plan especial británico para proteger a, Collins, dado su importante papel en el proceso de pacificación de Irlanda. Según The Daily Telegraph, gracias a esa cobertura secreta Collins pudo desarrollar libremente su mortífera actividad en Dublín.

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