Pujol acusa al Reino Unido de 'dumping social' por quitarle inversiones

El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, atacó ayer a los países que practican el dumping social (políticas que garantizan reducidas cotizaciones sociales a las empresas) como estrategia para atraer inversiones de forma desleal. En concreto, Pujol acusó, entre otros, al Reino Unido y señaló que se debe "luchar contra esta práctica que hace que se pierdan inversiones". El presidente de la Generalitat hizo estas declaraciones durante una comida de celebración de los 1.000 expedientes presentados ante el Tribunal Laboral de Cataluña."Perdemos inversiones porque en Gran Bretaña [Reino Unido] se dan unas facilidades que no entiendo como no son prohibidas por las autoridades de Bruselas", agregó ante un centenar de personas vinculadas con la política sociolaboral catalana. "La solución", según Pujol, "es la de presionar a los países que lo practican actualmente".

El denominado dumping social hace referencia, en el caso británico, a las menores cotizaciones sociales que deben pagar las empresas, y al marco laboral más desregulado. Además de esta situación las autoridades británicas ofrecen importantes ayudas a la instalación de nuevas empresas.Oportunidades perdidas

Cataluña compite desde hace varios años con el Reino Unido en la instalación de empresas japonesas y surcoreanas. Esta comunidad autónoma no consiguió en 1995 que la multinacional surcoreana Samsung invirtiera 91.000 millones de pesetas en su nueva fábrica de ordenadores, hornos microondas y otros productos. La empresa optó, finalmente, por instalarse en la localidad de Cleveland atraída por las ayudas y subvenciones que le ofrecieron las autoridades británicas.

Cataluña ha perdido recientemente otra inversión de la surcoreana Daewoo, que ha preferido instalar en el País Vasco una fábrica de electrodomésticos debido a las ventajas fiscales. Las inversiones extranjeras en el sector industrial se han reducido en Catalunya en un 28% en el primer semestre del año.

El presidente de la Generalitat dijo que "países como Marruecos siempre producirán más barato" y que la vía para luchar contra esta competencia tiene que ir por una mejora de la calidad de los productos.

Tras la comida, tomaron la palabra, además de Pujol, el secretario general de UGT de Cataluña, José María Álvarez, y el presidente de la patronal catalana Fomento del Trabajo, Joan Rosell, que compartieron la mesa con el presidente catalán. El gran ausente fue el secretario general de CC OO de Cataluña, Joan Coscubiela, que decidió no asistir al acto en protesta por la actitud de la Generalitat respecto a los funcionarios.