_
_
_
_
_
REFORMA DE LA SANIDAD PÚBLICA.

La gestión privada llega a los hospitales públicos

Dos fundaciones del Insalud se suman esta semana a los modelos de Galicia, Andalucía y Cataluña

Consorcios, fundaciones, sociedades mercantiles, son algunas armas del derecho privado que penetran en la sanidad pública española desde principios de esta década. Abrumado por el constante incremento del gasto, el Sistema Nacional de Salud busca instrumentos, no exentos de polémica, que le permitan mejorar su eficiencia, en aras de mantener la universalidad y equidad que le caracterizan. Siete comunidades autónomas y el Insalud, más recientemente, han legislado para que sus hospitales puedan funcionar como empresas con entidad jurídica propia. Una reforma más profunda se cuece en el seno de la ponencia parlamentaria creada para ello.

Más información
La joya de la corona andaluza

"Con prudencia, pero con tenacidad". Así define el secretario general de Asistencia Sanitaria, Alberto Núñez Feijoo, la actitud del Ministerio de Sanidad para acometer la reforma sanitaria en las 10 comunidades autónomas que administra el Insalud. El nuevo equipo ministerial apenas había tomado posesión cuando se aprobó el decreto ley que cambiará la gestión hospitalaria. Y aunque aún se está tramitando en el parlamento como proyecto de ley, en los próximos días se aprobarán los estatutos de las dos primeras fundaciones que salen a la luz conforme a las nuevas reglas del juego: los hospitales de Manacor (Mallorca) y Alcorcón (Madrid).El primero de ellos, ya construido y equipado comenzará a funcionar en breve. Dispone de 191 camas y atenderá a una población de 130.000 habitantes. Alcorcón (con 576 camas previstas) está aún en construcción. Son abanderados de una renovación del Insalud que, de momento, no irá más allá. "Analizaremos estas experiencias y escucharemos las conclusiones de la ponencia parlamentaria [para la reforma de la sanidad] antes de tomar más decisiones", se compromete Núñez Feijoo.

El objetivo del nuevo modelo, según Feijoo, es garantizar, mejorando la eficiencia, el resto de los principios que caracterizan al Sistema Nacional de Salud: universalidad de la asistencia, financiación pública, aseguramiento único y equidad en el acceso. "Nos vamos a centrar en obtener los mejores resultados con los menores costes".

La fórmula elegida para el Insalud es la de fundaciones, definidas en la ley de 1984 como "organizaciones constituidas sin ánimo de lucro que, por voluntad de sus creadores, tienen afectado de modo duradero su patrimonio a la realización de fines de interés general". El patrimonio en el caso sanitario serán los hospitales "y si se quisieran vender se disolvería la fundación", explica Núñez. Sus características serán las siguientes:Órgano rector. Un patronato integrado por representantes de las Administraciones públicas y del propio centro. Su presidente será en las primeras experiencias de Manacor y Alcorcón, Alberto Núñez Feijoo, "simplemente por un criterio de prudencia", indica.

Financiación. Al principio, los centros de nueva creación recibirán una transferencia, como subvención, para su montaje y equipamiento. Posteriormente, se financiarán por contratos programa anuales en función de la población atendida. El centro facturará al Insalud un precio fijo por cada patología y en algunos casos, por estancia hospitalaria. En el caso de que tuviera beneficios deberá reinvertirlos.Compras. Los hospitales podrán negociar precios y pagar directamente a sus proveedores al disponer de caja propia, como cualquier empresa privada. También tendrán capacidad para gestionar créditos con entidades financieras siempre que las operaciones se amorticen en el plazo de un año.Personal. Los trabajadores, sanitarios y no sanitarios, no serán funcionarios, sino personal laboral sujeto a contrato. Dependerán de su propio hospital Y no del Insalud como sistema. Los centros elegirán a sus propios trabajadores mediante pruebas selectivas que valorarán mérito y capacidad profesional. También se valorará su pertenencia anterior a la sanidad pública.Retribuciones. Los salarios se regirán por convenios. Entre las mismas categorías laborales, variarán en función de las características del puesto de trabajo (especificidad, peligrosidad, etc...) y existirá un mayor componente de productividad variable en cada unidad hospitalaria. Para parte del personal sanitario se prevé jornada partida de mañana y tarde. Los nuevos centros "funcionarán con menos personal en relación con las plantillas de algunos hospitales de la red actual", anuncia Núñez.Prestaciones. Tendrán las prestaciones sanitarias públicas correspondientes a los hospitales de sus características en función de su número de camas, asegura Núñez Feijoo. Aquellos servicios que no se consideren rentables dentro del propio centro por su dimensión, se contratarán con organismos públicos o privados. En el caso de Manacor, se baraja la contratación externa de algunos servicios de diagnóstico.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_