Hassan II ofrece a la oposición abrir el diálogo sobre las leyes electorales
El rey Hassan II de Marruecos ha abierto sus brazos a los partidos políticos de la oposición democrática y se ha declarado dispuesto a negociar con todas las formaciones políticas las futuras leyes electorales del reino, así como las referidas a los gobiernos regionales, que se instaurarán proximamente de acuerdo con la reforma constitucional votada el pasado mes de septiembre. El monarca alauí hizo este ofrecimiento a la oposición y a los demás partidos de manera solemne, con un discurso pronunciado ayer en el Parlamento de Rabat con ocasión de la apertura del año legislativo.
El rey recalcó de manera enérgica ante los líderes políticos que quería "llegar a un consenso sin demagogia ni complejos". El monarca añadió que los dirigentes de los partidos serán llamados a consultas al Palacio Real en los próximos días para abrir la mesa del diálogo.La oferta de Hassan II a la oposición cierra las heridas abiertas la pasada primavera, cuando los partidos democráticos integrados en el bloque Kutla enviaron al rey un memorando en el que planteaban una serie de importantes modificaciones constitucionales y sugerían al soberano que- cediera algunas de sus prerrogativas en favor del Parlamento y el Gobierno.
La propuesta de la oposición, convenientemente filtrada por periódicos próximos al poder, provocó una tensa situación entre el Palacio Real y los líderes históricos de la oposición, especialmente del partido socialista -Unión Socialista de las Fuerzas Populares- y del nacionalista Istiqlal, que tuvieron que contemporizar y hacer una nueva lectura del memorando que ponía el acento sobre otros puntos menos conflictivos.
El soberano expuso asimismo en su discurso de ayer las líneas generales del programa político para los próximos años basado en tres puntos principales: la regionalización del país, la estructuración de bloques políticos que permitan la altemancia y, por último, la celebración de unas elecciones legislativas transparentes.
En opinión del rey, la región será una de las piezas fundamentales de la futura Administración de Marruecos. También destacó que los bloques políticos constituidos en tomo a los, dos ya existentes -Wifak, para la derecha y Kutla, para la izquierda- son la garantía de una alternancia que se vería fortalecida con la aparición de un grupo de centro.
El proceso de reformas políticas esbozado por el rey culminará con unas elecciones legislativas, previstas para el próximo ano. Hassan II se comprometió ayer personalmente a que esta consulta sea transparente y limpia y suponga el fin de la vieja política de fraude electoral.
La legislatura que se abrió ayer en el Parlamento de Rabat es la última del antiguo régimen. A partir de las próximas elecciones el Parlamento constará de dos cámaras, la de los Diputados y la de los Representantes. Sólo la primera será elegida por sufragio universal directo.
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