La policía mexicana encuentra restos humanos en la finca del hermano del ex presidente Salinas
La policía mexicana encontró a primeras horas de la tarde de ayer un cráneo y otros restos. humanos enterrados en las caballerizas de la finca El Encanto, una lujosa mansión que posee Raúl Salinas al oeste del Distrito Federal. Un nutrido grupo de agentes de la Procuraduría General de la República (un híbrido entre Fiscalía y Ministerio de Justicia) comenzaron al mediodía del martes una espectacular operación en la finca del hermano del ex presidente Carlos Salinas, después de que una juez ordenara la búsqueda del cadáver de un presunto cómplice de Raúl Salinas en el asesinato del secretario general del Partido Revolucionario Institucional (PRI) José Francisco Ruiz Massieu, el 28 de septiembre de 1994.
El cuerpo que buscan las autoridades mexicanas es el del diputado federal Manuel Muñoz Rocha, que desapareció pocos días después de que el entonces líder priísta y ex esposo de Adriana Salinas de Gortari muriera acribillado a balazos a la puerta de un céntrico hotel de la Ciudad de México. Raúl Salinas permanece encarcelado desde febrero del pasado año, bajo la acusación de ser el autor intelectual del crimen. El desaparecido Muñoz Rocha también figura en la lista de sospechosos como cómplice del hermano del ex presidente en la preparación y concepción del asesinato.La policía cree que Raúl Salinas pudo haber matado a Muñoz Rocha para cortar todos los cabos que le involucrasen en la muerte de su ex cuñado. El procurador general de la República, Antonio Lozano, y el fiscal especial encargado del caso, Pablo Chapa, tenían previsto ofrecer una conferencia de prensa para dar a conocer los últimos detalles sobre la investigación, aunque a las dos y media de esta madrugada aún no había tenido lugar.
Aunque no se tratara de Muñoz Rocha, el cráneo partido por la mitad y los otros restos humanos hallados en sus caballerizas le van a traer muchos quebraderos de cabeza a Raúl Salinas, que podría verse involucrado en otra acusación de homicidio. Conocedor de los torticeros vericuetos de la justicia mexicana, el abogado de Raúl Salinas, Eduardo Luengo, se personó en las excavaciones de la finca con un notario y un fotógrafo para cerciorarse de que no le sembraran un muerto a su cliente. La táctica del letrado adelanta lo que podría ser el contraataque de la defensa de Raúl Salinas: negar la veracidad de las investigaciones y arrojar más ponzoña sobre las ya desacreditadas instituciones de justicia.
El alzamiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), en Año Nuevo de 1994, el asesinato del candidato presidencial del PRI Luis Donaldo Colosio, el 23 de marzo del mismo año y la posterior muerte de Ruiz Massieu supusieron un severo mazazo a la imagen de un México moderno propugnada, precisamente, por el ex presidente Carlos Salinas y sumieron al país en un periodo de inestabilidad que propició la salida de gran parte del capital extranjero y la posterior crisis económica.
El macabro hallazgo ha avivado las especulaciones sobre una caso que ha sacudido las esferas de la alta sociedad mexicana y que se toma del todo inextricable en muchos aspectos por los vínculos políticos, económicos, familiares e incluso amorosos que lo rodean.
El hermano del ex presidente Salinas también está acusado de un presunto delito de blanqueo de dinero procedente del narcotráfico. La policía de Suiza detuvo el pasado otoño a la esposa de Raúl Salinas, Paulina Castañón, cuando intentaba retirar 84 millones de dólares con documentación de su marido bajo un nombre falso. Otro miembro del clan de los Salinas, Enrique, está bajo investigación en Francia por una supuesta compra irregular de bienes raíces. El propio ex presidente permanece desde hace más de un año en exilio voluntario en un periplo que le ha llevado a residir en Canadá, Cuba y, ahora, Irlanda. Otra pincelada más de esta surrealista situación la aplica Mario Ruiz Massieu, hermano del asesinado, quien estuvo a cargo de las investigaciones sobre el crimen y que posteriormente huyó de México momentos antes de que la policía lo detuviera por su presunto encubrimiento de los responsables de la muerte de José Francisco, precisamente a Raúl.
Tras intentar huir a España con toda su familia, Mario Ruiz Massieu fue detenido en el aeropuerto de Newark (EE UU) por un pequeño delito aduanero.
Para colmo, la supuesta amante española de Raúl Salinas, Mana Bemal, fue grabada en vídeo mientras intentaba chantajear a la familia Salinas. Bernal aseguraba conocer el paradero de Muñoz Rocha y amenazaba con hacerlo público.
