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Ruiz-Gallardón pone 11 reparos al modelo de financiación autonómica

Los técnicos de Alberto Ruiz-Gallardón han preparado una receta de financiación, autonómica que pretende mejorar en 11 aspectos la fórmula diseñada por el Gobierno de José María Aznar. Pese a este propósito de hacer enmiendas, el Ejecutivo madrileño juró ayer disciplina y anunció su voto a favor del nuevo sistema de financiación autonómica aunque se rechacen las propuestas de la Comunidad de Madrid.Las mejoras que desea Ruiz-Gallardón permitirían aumentar los ingresos regionales a costa de la caja del Estado. El consejero madrileño de Hacienda , Antonio Beteta, defenderá el lunes las "11 mejoras" en el Consejo de Política Fiscal y Financiera. Para despejar dudas sobre posibles discrepancias, Beteta declaró ayer su apoyo incondicional al modelo de la Administración central: "El sistema es bueno porque es positivo. Tiene un aprobado alto, pero queremos mejorarlo para que tenga un notable o un sobresaliente". Algunas de las medidas pensadas por el Gobierno de Madrid se aprobarán sin problemas, según Beteta. Por ejemplo, Madrid, se igualará en el reparto de pesetas por habitante a las comunidades de la vía rápida (Andalucía, Cataluña, Galicia y País Vasco) cuando reciba las competencias en educación no universitaria, en 1998.

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Ahora Madrid ingresa del Estado 35.000 pesetas por habitante (169.000 millones al año). Con la transferencia educativa recibirá más de 100.000 pesetas por habitante (cerca de 500.000 millones al año) para gestionar al nuevo servicio, cuyo coste efectivo rozará los 400.000 millones, según las primeras estimaciones. "Es la única manera de asumir la competencia", dice Antonio Beteta, consejero de Hacienda.La Comunidad de Madrid también propondrá que se amplíe a todas las autonomías la capacidad normativa que tienen Navarra y País Vasco sobre el impuesto de sociedades que pagan las empresas. Vizcaya ha utilizado esa ventaja fiscaI para rebajar el tipo impositivo. "SI jugamos un partido de tenis, no es posible que a unos [Navarra y País Vasco] les den una raqueta de tenis y a otros [el resto de autonomías] una raqueta de bádminton, porque no podemos golpear con la misma fuerza", explicó Beteta.

El Gobierno regional confirmó ayer que no recurrirá contra el privilegio fiscal, aunque el Gobierno de Aznar no otorgue este derecho al resto de autonomías. "Otras regiones han recurrido ya, y los jueces han resuelto que no tienen legitimidad para hacerlo. Sólo puede recurrir la Administración central o un particular", señaló Beteta.

También pide el Ejecutivo madrileño que el Estado compense a las autonomías cuando pierdan ingresos por rebajas fiscales del Estado. Un ejemplo práctico: la modificación del impuesto de transmisiones patrimoniales decidida hace unos meses por el Ministerio de Economía dejará a Madrid sin "algunos miles de millones. de pesetas", según Beteta. "Mientras el Gobierno nacional se lleva el beneficio político de la medida, que a nosotros nos parece buena, las comunidades autónomas pagan sus consecuencias. Eso no puede ser. Que pague quien apruebe la rebaja", exigió ayer Beteta.

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