_
_
_
_
Crítica:31º FESTIVAL DE JAZZ DE SAN SEBASTIAN
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Sabios discretos

Nadie quería que aquello se acabase. Hank Jones volvió a deleitar, esta vez. a piano solo, y se erigió en el gran protagonista de la tercera jornada del festival donostiarra. Su recital se basó en un tonificante ramillete de temas de muy diverso calado emocional, desde el liviano Bluessette al ceremonioso A child is born, todos homogeneizados por su mano cálida y segura, por su pulsación ponderada y su swing aristocrático. En un día repleto de pianistas se empezó por lo más alto, por el mejor, y ni juntándolos a pares pudo desvanecerse la imagen egregia de Jones sentado ante un teclado.Aki Takase y Yosuke Yamashita son dos nombres postineros del jazz japonés. La dama se dio a conocer años atrás a través del exótico dúo formado con la cantante portuguesa María Joao, mientras el caballero desarrolló una discreta carrera en su país natal, hasta que decidió fundar un trío con colegas de la escena neoyorquina. Ambos en tienden el piano a la manera moderna, es decir, incluyen a Cecil Taylor en su nómina de influencias, y no se privan de ningún recurso por irreverente que parezca. Cualquier dúo de pianistas inquieta un poco de entra da, pero estás dos furias orienta les asustaron de verdad con un despliegue de tremendos racimos de notas, imponentes golpes de codos, ostinatos a granel y otros efectos de sobrecogedora truculencia que pusieron a prueba la osamenta de sus respectivos instrumentos. Después, un entretenido ejercicio neobarroco y el rhythm-A-ning mon kiano suavizaron la impresión inicial y advirtieron que la pareja pisa con aplomo sobre cualquier terreno estilístico. Ya entonces dio la impresión de que entre las cuatro paredes del salón de plenos del Ayuntamiento se iba a escuchar la mejor música del día.

Hank Jones (piano solo)

Yosuke Yamashita & Aki Takase. Terence Blanchard Quintet. Horace Silver Septet. Hank Jones Trio.San Sebastián, 26 de julio.

Los dos conciertos de la plaza de la Trinidad no figurarán en la crónica de memorable del festival. El de Terence Blanchard, por una elección temática equivocada, y el del septeto de Horace Silver, sencillamente, por agravio comparativo con el pasado. El trompetista, sin duda uno de los mejores del momento, cedió protagonismo a un cantante engolado y efectista para repasar algunas piezas de su último disco, dedicado a la música del compositor brasileño Ivan Lins. Blanchard no se halló confortable en ningún momento y casi se pudo palpar su lucha interna por hermanar un idioma que conoce parcialmente con otro que domina a la perfección.

El problema de Silver estriba en que su impresionante historia, coarta sus intentos de permanecer vigente. Su último disco, The hardbop grandpop aparece repleto de estupendas melodías sin malicia que revolotean sobre un swing mullido y optimista. Música menor en comparación con la imbatible escuadra de composiciones que abrieron camino al hard bop. De éstas, el cuarto pianista de la jornada sólo ofreció el celebérrimo Song for myfather al frente de un septeto de correctos desconocidos.

Pero el día no podía acabar así y Hank Jones regresó de madrugada al escenario del milagro de la tarde para destapar otro ratito su inagotable tarro de las esencias. La incorporación de Blanchard a su trío en un par de títulos dio ocasión de paladear al inusual Jones bopper, todo un lujo que el festival donostiarra le reconoció entregándole una placa conmemorativa, tal y como el año pasado se hizo con el entrañable trompetista Doc Cheatham.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_