España pagó con fondos reservados a los inmigrantes acogidos por Malí

El equivalente a 250.000 pesetas se llevó cada uno de los 19 inmigrantes expulsados por España y que fueron acogidos por Malí. Ese es el peaje que impusieron las autoridades de Bamako para aceptar a sus ciudadanos, inmigrantes ilegales que entraron en territorio español a través de Melilla. Los 19 malienses recibieron cada uno 250.000 pesetas (un millón de francos de la Comunidad Francófona de África), una fortuna en Malí, para rehacer su vida. Esta medida crea un precedente que fuentes diplomáticas españolas temen que sea seguido por otros países africanos. El dinero fue abonado por Interior con fondos reservados. "Nunca una potencia europea había sido tan magnánima", comentó un diplomático acreditado en Malí. En Senegal, Interior también pagó la manutención de los expulsados en dependencias del Gobierno senegalés.