Conde busca hacer negocios en Aragón junto a un polémico empresario local

El ex presidente de Banesto se resiste a abandonar los negocios. En una reciente entrevista manifestó al presidente de la Federación Aragonesa de Municipios, el popular Carlos Til, su interés por invertir en Aragón. El contacto y anfitrión de Conde en Aragón es Luis Oliver, polémico empresario del ramo de la seguridad. Buena parte de los bienes de Conde están sirviendo como avales para las fianzas en varios procesos judiciales. Conde está a la espera de que el juez García-Castellón fije la cuantía de la responsabilidad civil en el caso Banesto.

Los funcionarios del ayuntamiento de Gurrea de Gállego, el municipio fronterizo entre las provincias de Zaragoza y Huesca , a orillas del río que apellida la localidad, apenas tuvieron tiempo de soprenderse por la brillantina del peinado de su interlocutor cuando a mediodía del pasado 18 de abril un cuarentón bien vestido y llamativamente escoltado por otros dos varones, estos más jóvenes y de porte atlético, les espetó: "Buenos días. Soy Mario Conde. Quiero ver al alcalde". El primer edil, también presidente de la Federación Aragonesa de Municipios, estaba en su despacho junto a empleados de la compañía telefónica, para que acondicionaran el prefijo de su pueblo al de la provincia oscense a la que pertenece, en lugar del actual, correspondiente a la de Zaragoza.El ex presidente de Banesto, ahora en libertad bajo fianza, no tenía otra intención que visitar algunos puntos de la comarca susceptible de futuras inversiones., El financiero afirmó estar atraído por el futuro del eje norte-sur que tendrá un notable desarrollo con la construcción, ya en marcha, de la autovía entre Zaragoza y Huesca que se prolongará como vía de gran capacidad a través del túnel del Somport, la obra que apenas cuatro días después iba a visitar Felipe González.

En palabras de quienes hablaron con él, entre ellos el alcalde de Gurrea, Carlos Til (PP), Conde tenía "muy buen conocimiento de la zona". En opinión de Conde, la nueva autovía "va a suponer un gran empuje al desarrollo del corredor del Ebro" y a los pocos minutos de estar hablado "parecía saber más que sus interlocutores de la materia en discusión". Conde instó al alcalde a que le acompañara a visitar las dos principales factorías de la zona. Una dedicada a trabajar la piel y otra pionera en España en la contrucción de chalés no sólo prefabricados, sino "a la carta".

Til desmiente rotundamente a quienes dicen que esta no era su primera visita y que Conde ya había estado otras veces, incluso cenando en el domicilio del alcalde. Otros ciudadanos de su pueblo aseguran haber visto a bordo dé potente vehículo al financiero. Después de tomar el aperitivo con el alcalde, conoció los pormenores de ambas factorías. Una proporciona empleo a más de cien trabajadores y la otra está a punto de terminar su construcción, con una inversión que supera los 500 millones de pesetas. Tan interesante le pareció este proyecto que Conde visitó las instalaciones dos veces, antes de comer y después de hacerlo en compañía de dos empresarios zaragozanos en el vecino restaurante Los Pirineos. Arturo Romaní, íntimo amigo de Conde y, cómo éste inculpado en el caso Banesto, es aragonés y conoce bien esa zona. Es posible también que el empresario mallorquín Pedro Pueyo forme parte del grupo inversor junto a Conde.

La charla fue amena durante el almuerzo, según cuentan quienes vieron a los tres comensales. Conde ya conocía a sus interlocutores, especialmente a uno de ellos Luis Oliver, empresario del ramo de la seguridad, de fuerte carácter y conflictivo en su comportamiento, según quienes han tenido que sufrir sus bravatas por manifestar opiniones en su contra. Oliver y, su hermano son veteranos en el sector. Fueron reiteradamente sancionados por la Delegación del Gobierno en Aragón por no cumplir las normas necesarias para trabajar con empresas de seguridad y hay al menos un letrado en Aragón que les sigue la pista, oculta tras un rosario de subrogaciones en empresas de vigilancia y protección, para tratar de reclamarles su responsabilidad.

Con Roldán

Con una de estas empresas actuaron primero en la conflictiva obra de la autovía del Leizarán (Navarra-Guipúzcoa) y, más tarde, por indicación de Luis Roldán, entonces al frente de la Guardia Civil, en la construcción de la presa navarra de Itoiz. La concesión de esta obra les fue retirada al advertirse presuntas irregularidades y cobro de comisiones por parte de los integrantes del Clan Roldán en la Comunidad Foral.El "introductor" de Conde (a quien no dejó de arropar durante la estancia del financiero en prisión) estuvo vinculado a los grupos parafascistas durante el periodo de la transición a la democracia y logró acercarse a dirigentes socialistas de la mano de otro controvertido empresario aragonés, Arturo Beltrán, quien también tuvo relaciones con Mario Conde cuando éste presidía Banesto.

Arturo Beltrán ha visto subastadas sus propiedades esta misma semana, al mismo tiempo que participaba, desde su convalecencia en una clínica en Nueva York, en la compra de las instalaciones del casino de Zaragoza. Beltrán contactó con destacados socialistas a través del mundo de los toros. Luis Roldán, José María Benegas, Gabriel Urralburu o Ramón Criado se han encontrado entre sus agasajados invitados.