Nueva demanda contra Mitsubishi por tolerar orgías en la empresa
La denuncia de acoso sexual en Illinois puede costar a la firma 18.500 millones
Una semana después de que la Comisión Para la Igualdad de Oportunidades en el Empleo entablara una demanda contra el grupo japonés del automóvil Mitsubishi por acoso sexual masivo en la planta de Illinois, 28 trabajadoras han presentado una querella en la que se detallan con toda crudeza fiestas sexuales toleradas por la dirección de la empresa. Mitsubishi ha reaccionado movilizando a la plantilla de 4.000 empleados contra las acusaciones y sugiriendo que si las querellas tienen éxito se perderán empleos. El supuesto acoso masivo podría costar a Mitsubishi 18.500 millones de pesetas.
Desde hace dos años, se dice en la nueva demanda, se han organizado y anunciado abiertamente fiestas en las que se contrató a prostitutas "para mantener relaciones sexuales en público con los asistentes" en varias celebraciones con distintos motivos. Las fotografías que se tomaban en las fiestas de los empleados masculinos involucrados en las actividades sexuales circulaban después para regocijo del personal, sin que la dirección de la empresa, que estaba al tanto del asunto, hiciera nada para frenarlo. Algunos ejecutivos de Mitsubishi asistieron a las juergas. El nivel de publicidad de las celebraciones incluía la recogida de fondos para dar más brillantez a los espectáculos.Otro elemento ha contribuído a aumentar la tensión: el incendio provocado de la casa de Patrick Walter, responsable de Relaciones Humanas de la empresa y uno de los dos altos ejecutivos de Mitsubishi que está dirigiendo la campaña para que los empleados nieguen las acusaciones de acoso sexual.
La dirección de Mitsubishi en Illinois está movilizándose contra la demanda de la Comisión para la Igualdad de Oportunidades sin ahorrar ningún esfuerzo. Según George Galland, abogado de las mujeres demandantes, la empresa está difundiendo entre sus empleados la ridícula propaganda" de que sus puestos de trabajo podrían perderse si sigue adelante la demanda judicial.
El próximo lunes, 52 autobuses fletados por Mitsubishi trasladarán a cientos de empleados de la firma a manifestarse ante las oficinas de la Comisión en Chicago, en apoyo de la empresa. Mitsubishi ha dado tiempo libre a todos los que quieran acudir a la manifestación, garantizando la paga completa de la jornada y el almuerzo.
En la planta de Normal, Illinois, se han pasado circulares animando a los empleados a acudir y cartas para firmar en las que se respalda a la empresa, además de cinco teléfonos para que los trabajadores llamen a los responsables de la Comisión, a la Casa Blanca y al Congreso. Los empleados más entusiastas están organizando recogidas de fondos para publicar anuncios favorables a Mitsubishi.
La demanda de la Comisión para la Igualdad de Oportunidades podría convertirse en la mayor querella por razones de acoso sexual en EE UU, tanto por las personas afectadas -potencialmente, alrededor de 500 empleadas- como por las compensaciones económicas que obtendrían en caso de que la empresa fuera condenada. Se calcula que cada demandante obtendría unos 37 millones de pesetas. En ese caso, Mitsubishi debería hacer frente hasta un total de 18.500 millones de pesetas en indemnizaciones.
La Comisión argumenta que trabajadores y mandos intermedios de la empresa han sometido a cientos de mujeres a acoso sexual desde hace años, al tiempo que la dirección ignoraba las protestas de las empleadas.
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