Dímite el hombre de confianza de Menem

Aquejado por una hepatitis crónica, renunció el jefe del Gabinete, Eduardo Bauzá, principal colaborador del presidente Carlos Menem, su confidente en asuntos de Estado, operador fundamental en las misiones delicadas y el hombre con más poder político en Argentina después del jefe de Estado. Bauzá, de 57 años, será sustituido por otro hombre muy cercano al gobernante, el ministro del Educación, Jorge Rodríguez, un nombramiento que sorprendió. "El presidente me dijo que tenía que optar entre el cargo o la vida", declaró ayer el renunciante.Es un hombre dialogante y moderado, sin pretensiones políticas que hubieran podido estorbar las ambiciones de su jefe. Durante el agrio enfrentamiento del presidente con su determinante ministro de Economía, Domingo. Cavallo, cuya onda expansiva afectó el curso de la economía nacional, el dimisionario reclamó cautela y paciencia.

Mediante una política de desgaste, que no de derribo, porque la coyuntura lo impide y los apoyos de Cavallo son muy fuertes, el titular de la cartera más importante perdió competencias y debió doblegarse a la autoridad presidencial. Fuentes oficiales citaron, sin embargo, la intervención de Cavallo ante Menem y su éxito para impedir que la jefatura de gabinete fuera ocupada por Carlos Corach, ministro del Interior, con quien tuvo frecuentes choques.