Las poblaciones de nutria siguen en descenso en los ríos mediterráneos

El Icona hizo una aproximación de censo de nutrias en España en los años sesenta. En 1984, con el biólogo Miguel Delibes a la cabeza, se volvió a hacer un sondeo. Ahora, Adena / WWF y la Sociedad Española para la Conservación y Estudio de los Mamíferos (Secem) intentan completar un nuevo mapa de su distribución en la Península Ibérica. Primeros resultados: hay una tímida recuperación de sus poblaciones en Portugal, Galicia y Extremadura. Sigue el declive, sin embargo, en la vertiente mediterránea. Quedan entre 5.000 y 10.000.

A pesar de los problemas y amenazas, España sigue siendo, junto a Irlanda y Portugal, la principal reserva de la nutria euroasiática (Lutra lutra) en Europa occidental. En países como el Reino Unido y los de Centroeuropa su población se encuentra muy mermada, según Adena / WWF. En Luxemburgo y Holanda se da por extinguida.En España, es muy escasa o inexistente en gran parte de Cataluña, las llanuras cultivadas de las dos Castillas (donde se ha visto afectada especialmente por los plaguicidas agrícolas) y los valles del Ebro y el Guadalquivir, según el Libro Rojo de los Vertebrados de España, del Ministerio de Agricultura. Se estima que entre los años sesenta y ochenta desapareció el 60% de la población nacional. El pasado otoño, la Junta de Extremadura firmó un convenio con la Generalitat de Cataluña para enviar varias parejas de nutrias durante tres años para reintroducir este animal.

Emilio Virgós, del Secem, explicó que, si en el pasado la caza fue la principal amenaza para este animal, ahora sus mayores enemigos son la contaminación de los ríos y la destrucción de su hábitat por la desaparición de los bosques de ribera y la ejecución de obras como canalizaciones y presas hechas sin ningún cuidado para la nutria. "La caza furtiva de nutrias es ya algo anecdótico en la actualidad", añadió.

Miguel Ángel Valladares, de Adena / WWF, que habló de la "capacidad lúdica" del animal -"es una maravilla ver cómo construyen toboganes en las orillas"- destacó su valor "como bioindicador de la calidad de ríos y sotos". Ambos destacaron que los embalses de Irueña (Salamanca) e Itoiz (Navarra) van a ser muy perjudiciales para las poblaciones de nutrias en esos tramos de río.

Para el ex director de la Estación Biológica de Doñana, Miguel Delibes, que también participa en esta campaña pro-nutria, aunque ayer no pudo asistir a la presentación en Madrid, este animal representa a la perfección las lagunas en la investigación para armonizar el desarrollo de un país con la conservación de su naturaleza. Recientemente declaraba: "Me resisto a pensar que sean totalmente incompatibles los embalses y las nutrias. Lo que pasa es que no se ha investigado lo suficiente para hacerlo posible, habilitando, por ejemplo, pasos de fauna".

Adena / WWF y la Sociedad Española de Ornitología (SEO) llevarán a cabo todo el año sendas campañas en defensa de los "ríos vivos".