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Entrevista:

"Debe tenerse más en cuenta que somos el quinto país de Europa"

Carlos Westendorp, de 58 años, ministro de Exteriores en funciones, es uno de los hombres que más sabe de la Conferencia Intergubernamental que mañana se inaugura en Turín con el propósito de reformar Maastricht. Presidió durante siete meses el grupo encargado de prepararla. Ahora explica cuáles son los objetivos españoles.Pregunta. ¿Qué busca España?

Respuesta. Adaptar la UE al día de hoy atendiendo a preocupaciones de los ciudadanos al día de mañana. Prepararla para la mayor ampliación de su historia acrecentando su eficacia. Se conseguirá ahondando la integración y mejorando la representación democrática. Esto implica que se tenga más en cuenta que somos el quinto país de Europa por su población.

P. ¿Qué traducción tiene esto en la Comisión Europea?

R. La mejor solución sería que no hubiese más de 15 comisarios, en lugar de los 20 actuales, elegidos por el presidente de la Comisión a propuesta de los Gobiernos y teniendo en cuenta un equilibrio geográfico Norte-Sur. No aceptamos que haya un sólo comisario por país si cada uno sólo dispone de un voto.

P. ¿Y en el Consejo de Ministros?

R. Mejorar la representación democrática. Para lograrlo hay que corregir la excesiva sobrerrepresentación de los Estados menos poblados otorgando más votos a los más poblados. Éstos serán los puntos más conflictivos de la negociación, porque hay una línea divisoria que enfrenta a ambas categorías de países.

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P. ¿También habría que generalizar el voto por mayoría cualificada?

R. Sí, excepto en asuntos como la ampliación a nuevos miembros ola financiación de la UE. Estamos a favor de que se vote por mayoría incluso en temas como medio ambiente, siempre y cuando las decisiones costosas que se nos obligue a tomar sean financiadas por la Unión.

P. ¿Cómo mejorar la deficiente política exterior de la UE?

R. Dándole un rostro y una voz. El secretario general del Consejo de Ministros debería ser un político, y no un alto funcionario, que encarne y dirija esa política junto con el ministro de Exteriores del país que presida la Unión y el presidente de la Comisión. Debería poder apoyarse en una célula de análisis.

P. ¿Qué persigue España en cooperación policial y judicial?

R. ¡Que todo evolucione en la misma dirección que la concesión de visados de entrada a ciudadanos de terceros países! La inclusión o no de un país en la lista se decidía antes por unanimidad y ahora ya se hace por mayoría. Reivindicamos además que los ciudadanos de un Estado miembro acusados de terrorismo no puedan gozar del asilo político en otro país de la Unión.

P. ¿Y en empleo?

R. Sabemos que seguirá siendo una competencia de cada Estado miembro y de los agentes económicos, pero estamos empeñados en alcanzar una mayor coordinación entre los Quince que fomente la creación de empleo a través de disposiciones que quedarían recogidas en el tratado. El protocolo social debe, además, formar parte del nuevo tratado.

P. ¿Es el Reino Unido el principal obstáculo a ir adelante?

R. Es el más ilustre portavoz de un enfoque de la construcción europea que una mayoría de socios rechazamos. Europa, según Londres, es cooperación intergubernarriental y perfeccionamiento del mercado único. Afortunadamente, el Reino Unido siempre acaba siguiendo el camino marcado por la mayoría y que, grosso modo, coincide con las ideas que he expuesto.

P. ¿Comparte el PP sus ideas? R. Sí. Las hemos trabajado conjuntamente a lo largo de estos años elaborando una posición consensuada a través de la Comisión Mixta Congreso-Senado para la UE. Con vistas a la cita de Turín ha habido contactos y total coincidencia.

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