Générale Sucrière y Acor acuerdan un plan para la compra del 39% de Azucarera al BCH

La empresa francesa Générale Sucrière (GS) y la cooperativa vallisoletana Acor se convertirán en los socios mayoritarios de Sociedad General Azucarera Española, según el plan diseñado por estos dos grupos y el Banco Central Hispano (BCH). Esta entidad, que posee el 49% del capital de la azucarera, se mantendría con el 10%. Acor y Générale Sucrière igualarían su paquete en el 24,9%. Esto significa que un 10% se reparta entre otros socios, ya que la firma francesa tiene en estos momentos el 20,5%. El BCH ingresaría por esta venta 16.000 millones.

Los responsables del BCH ya adelantaron, con motivo de la junta de accionistas de la entidad el pasado sábado, que la venta de Azucarera era una cosa hecha. La operación, si acaba cristalizando, pondrá fin a casi dos años de negociaciones y enfrentamientos después de que el Ministerio de Agricultura se opusiera a la venta de Azucarera a la firma francesa, aun existiendo un preacuerdo firmado por las dos partes según el que GS pasaría a controlar el 24,9%, límite que impide la obligación de lanzar una oferta pública de adquisición de acciones (OPA).El titular de Agricultura, Luis Atienza, pretendió alternativas con presencia de inversores españoles que no prosperaron. Esa postura fue apoyada por las organizaciones agrarias, opuestas a que pasara a manos extranjeras. El banco rechazó buena parte de las propuestas que contemplaban la entrada de otros socios financieros como Caja Salamanca y Soria o el Banco Popular. De ser así, el BCH habría perdido la potestad de ser el banco de la azucarera.

Compras en bolsa

Pero, mientras la operación estaba bloqueada, Générale Sucrière ha ido comprando participaciones de Azucarera -las que estaban en manos de Sucre Union y Man, así como algunos paquetes en bolsa- hasta hacerse con el 20,4%. Ahora, la nueva estrategia cumple un doble objetivo: el BCH podrá ingresar 16.000 millones por la venta de la mayor parte de su participación, permanecer como socio financiero con el 10% y ser el único banco de la empresa, con todo el negocio que eso conlleva.

Por otra parte, GS sería el gestor junto con Acor de Azucarera, empresa que preside José Joaquín Ysasi-Ysasmendi, al menos en una primera fase. Pero, lejos de poder ser acusados de asaltar la empresa provocando la guerra de las cuotas y la resistencia de los cultivadores nacionales, compartiría la sociedad con una firma nacional y además cooperativa. A su vez, ambas empresas lograrían un protagonismo en el azúcar que podría ser el inicio de nuevas operaciones de mayor envergadura en el sector que afectarían a la azucarera Ebro, hoy controlada por KIO y el Banco Santander.Durante los últimos años, la venta de las acciones del BCH en Azucarera ha tenido como principal obstáculo la falta de grupos industriales o financieros españoles con voluntad de entrar en la empresa al precio que ha planteado el grupo industrial francés.Según fuentes solventes, la cooperativa Acor, presidida por Fausto Morales, ya barajó hace dos años compartir la compra tanto con Générale Sucrière como con otras firmas extranjeras como Man o Tate Lyle.El fracaso para la presentación de las propuestas alternativas de compra hizo que los franceses se mantuvieran como la opción más firme para la compra, posibilidad que desde el propio BCH se consideró no se podría realizar mientras no cambiara la Administración. En círculos industriales se daba por hecho que un Gobierno del PP daría luz verde a esta operación. Sin embargo, en medios cercanos a GS, no hay seguridad de que una Administración popular, con amplias bases agrarias defensoras de la cuota azucarera en manos nacionales fuera a modificar la actitud de Luis Atienda. Por este motivo, los franceses habrían optado por una nueva y a la vez segura salida para ellos y también para el BCH.