"La música popular se está uniformando", según el grupo Milladoiro

La fidelidad del grupo Milladoiro a su idea original, una mezcla de música tradicional gallega e investigación en fuentes de siglos pasados, además de su constante inquietud creativa, les han convertido en un grupo de culto, no sólo en España, sino también en países como Estados Unidos o Japón. Acaba de salir al mercado su último disco, As fadas do estraño nome (Las hadas de extraño nombre), un compacto doble en directo con buen número de novedades y una selección de sus temas clásicos. Fue grabado en el teatro Cervantes de Buenos Aires en abril del año pasado.

Milladoiro, comenzó a forjarse en 1978. Algunos de sus componentes (Xosé V. Ferreirós y Fernando Casal) provenían de agrupaciones tradicionales que recorrían fiestas y romerías en contacto con los viejos gaiteros. Otros (Antón Seoane y Rodrigo Romaní) llevaban tiempo fascinados por sonoridades e instrumentos medievales. Xosé A. Méndez era buscador de tradiciones en archivos de música antigua. Durante casi 20 años han trabajado al margen de modas e imposiciones comerciales. La estrategia a resultado."Este trabajo", dice Antón Seoane, "responde a una antigua necesidad de hacer un álbum en directo. El título está tomado de un poema de Rosalía de Castro que habla de hadas de extraño nombre que sólo comparten con nosotros su gozar. Las hadas son esa energía misteriosa y mágica que se provoca entre el artista y el público".

Durante los últimos tres años han realizado diversos proyectos artísticos un poco al margen de su perfil como grupo. Suya es la banda sonora de la película El rey del río, de Manuel Gutiérrez Aragón; o Iacobus Magnus, con The English Chamber Orchestra; o Vía Láctea, la banda para un gran espectáculo de magia. "Nosotros trabajamos en muchos frentes", puntualiza Moncho García, "pero con As fadas do estraño nome recuperamos nuestra línea y presentamos nuevos temas. La grabación en Buenos Aires fue muy gratificante, con un público que transmite energía y estuvimos muy a gusto. Por algo dicen que Argentina es la quinta provincia gallega".

La gran lacra

Todos ellos están de acuerdo en que la gran lacra de la música popular española es la búsqueda del éxito a cualquier precio. "Eso es nefasto", comenta Rodrigo Romaní, "porque lo han convertido en el primer mandamiento. Para gozar de la música hay que conformarse con ser un eslabón en la cadena; en nuestro caso, en esa gran cadena de músicos anónimos". Hablan con cierta reticencia de algunos conceptos muy en boga entre los músicos, como fusión, mestizaje, new age y otros por el estilo. Están alejados de los esnobismos y de los posmodernos de salón. Seoane es tajante: "La única forma de acercarte a otras músicas o culturas sin perder tus señas de identidad es conociendo tu tradición. Y la tradición no pertenece a una multinacional; hay que mamarla en las raíces".Moncho García incide: "Eso de la fusión se les está indigestando a algunos. Hay gente que se dedica a picar por aquí y por allá; cogen músicas tradicionales y meten cuatro instrumentos con la excusa de actualizarse en un acercamiento a la aldea global y cosas por el estilo. Luego resulta que todo va sonando igual, lo surafricano, lo hindú, lo balcánico, lo celta. Están consiguiendo uniformar la música popular".

El próximo día 18 Milladoiro comienza una gira por Japón que les llevará a Tokio, Osaka, Nagoye y Kyoto. En abril proyectan un gran concierto en Madrid.