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TEATRO

Sobre todo, ingenio

La Cubana es una compañía escandalosa. Le gusta la calle, los gritos`, lo asombroso, lo sorprendente. Lo que hace, sólo lo puede hacer ella; y esta fiesta de Cegada de amor es, claro, así. Empieza a la puerta del teatro, y a la puerta termina, ofreciendo champaña (o sea, cava) y marrón glasé.No es todo escándalo: es ingenio. Como en una película de Woody Allen, La rosa púrpura del Cairo, los personajes entran y salen de la pantalla donde se pasa un filme. Pero esto no es cine, sino teatro, y requiere una precisión, una técnica, unos ensayos que no están al alcance de todo el mundo. También requiere que la película sea algo más que un pretexto y, en efecto, es de Fernando Trueba. El rodaje de un folletín, sus falsedades y sus trucos internos: todo eso salta de la película al escenario, y baja del escenario y se mezcla con el público. Domina el teatro, domina lo vivo. Si, además del ingenio, hay una brizna de doctrina, parece ser ésa: la deliberación en tomo a teatro y cine, con una inclinación hacia el primero. Es su opinión. La mía es que se trata de lo mismo.

Cegada de amor

Guión de Jordi Milán, Joaquín Oristrell, José Corbacho, Fernando Colomo. Realización de la película: Fernando Colorno. Intérpretes: Ana Barrachina, Silvia Aleacar y María ¡José Pérez, Cati Solivellas, David Ramírez, José Corbacho, Jaume Baucis, Santi Millán, Xavier Tena, Jordi Milán. Música y canciones: Joan Vives. Idea y dirección: Jordi Milán. Cine 'Lope de Vega, 25 de enero.

Los actores de La Cubana tienen una peculiaridad de hablar y moverse: muy teatral, o muy teatralizada; muy gritada y vocalizada, muy exagerada de movimientos. Es su forma -afortunada- de dar risa: la dan. Aunque el t ruco de la entrada y salida de la película a la sala, y al contrario, se repite mucho, la verdad es que cada vez se multiplica, se caotiza, se enreda: hasta lo inverosímil -pero ¿es que algo es verosímil?- , irrupción de la procesión, la virgencita, los nazarenos....

Nadie se va a quedar sin reírse. Rieron todos: con el desconcierto que tiene el público de invitados, en un estreno , para el teatro de participación. Pero puede que, con un público del que llamamos "de diario", funcione aún mejor.

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