ROBO CON ARTE

Arsenio Lupin, aquel ladrón caballeroso inventado por el novelista francés Maurice Leblanc, no lo hubiera hecho más limpiamente. Un ladrón robó durante el pasado fin de semana poco más de 50.000 pesetas de una gran urna situada en la catedral de León, en la que los ciudadanos depositan desde hace dos años sustanciosos donativos para la campaña Salvemos la catedral. El ladrón accedió a la capilla donde está instalada la gran urna de cristal de seguridad y aluminio a través de una de las vidrieras. Pero fue tan cuidadoso que primero desmontó sin romper ni un solo trozo esta obra de arte del siglo XIX. El autor del robo subió a la vidriera, a unos cinco metros de altura, por un andamio que se encuentra tapa do por una lona, y desde allí oculto, pudo dedicar su tiempo a sacar los trozos de vidrio y el emplomado y colocarlos con esmero junto al gran ventanal. Más tarde, a martillazos, rompió un extremo de la urna y se apropió de una mínima parte del dinero, ya que las espléndidas dádivas han alcanzado incluso los cinco millones de pesetas anuales.-