El vacío de Grecia

DESDE HACE 56 días, el jefe del Gobierno griego, Andreas Papandreu, está hospitalizado, y no hay indicios de una pronta recuperación. Ello ha creado una situación de claro vacío de poder, agravada por el estilo personalista de gobierno impuesto por Papandreu. Coincide esta situación con una preocupante evolución del escenario internacional más próximo a Grecia. Por una parte, la victoria de los islamistas en Turquía, su rival tradicional en la región que, por otra parte estrecha relaciones con la Unión Europea con vistas a una eventual integración futura. Por otra, el proceso de paz en los Balcanes, en el que Grecia es parte interesada por su permanente conflicto con Macedonia.La Constitución griega no contempla la designación de sucesor por incapacitación del jefe del Gobierno, por lo que tal designación requeriría, en todo caso, la dimisión de Papandreu. Su entorno personal se resiste a esa hipótesis, a favor de la cual se pronunció ayer mismo el comité ejecutivo de su partido, el Movimiento Panhelénico Socialista (PASOK). Con 169 de los 300 diputados del Parlamento, el PASOK dispone de mayoría suficiente para investir a un sucesor, pero, aparte de que el entorno familiar de Papandreu se resiste a la dimisión, una decisión que no contase con el apoyo del anciano líder dividiría seguramente tanto al grupo parlamentario como quizá al partido mismo.

La confusión entre la esfera pública y el ámbito privado es una característica de un partido creado como plataforma de Papandreu, hijo de primer ministro y padre de ministro, cuyo médico personal es el ministro de Sanidad y cuya esposa es jefa de gabinete de la jefatura de gobierno.

Dos personas se destacan ante la sucesión. Por un lado, el ministro de Defensa, Gerassimus Arsenis, bastante popular a resultas de las medidas salariales y de elevación de las pensiones que adoptó en su etapa como ministro de Economía, representante de un cierto continuismo populista, aunque ajeno a ese círculo familiar de Papandreu. Por otro, el diputado Costas Simitis, antiguo ministro de Industria, representativo del sector más europeísta y modernizador del partido.

Mientras, Papandreu, desde su cama de enfermo, ha expresado su deseo de entrevistarse con el presidente de la República, Costis Stephanopolos. A tal entrevista se le adjudica la intención por parte de Papandreu de ganar tiempo mediante el nombramiento de un vicepresidente temporal que asuma las funciones de jefe del Gobierno hasta su recuperación. Sus rivales atribuyen esa idea al entorno familiar, que trataría por todos los medios de evitar una salida definitiva que supusiera a la vez la emancipación del PASOK de esa carga de partido para un líder.

Se mezclan así las necesidades del país con las del partido mayoritario en el Parlamento. La falta de mecanismos de toma de decisión en ausencia del líder paralizan a la vez la renovación del PASOK y la acción del Gobierno, lo cual determina la ausencia de Grecia de foros en los que se discuten asuntos que le afectan muy directamente.