La temperatura media de la superficie de la Tierra alcanzó un récord en 1995
La temperatura media de la superficie de la Tierra aumentó en 1995, alcanzando un récord desde que se tienen registros, 1856, según datos de un informe provisional de La Oficina Británica de Meteorología y de la Universidad de East Anglia (Reino Unido). La temperatura media global, calculada sobre registros en tierra y en mar tomados en todo el planeta, fue de 14,84 grados centígrados, 0,4 centésimas, de grado por encima de la temperatura media registrada en el periodo comprendido entre los años 1961 y 1990, el récord anterior, según los británicos.
Al mismo tiempo, los datos del Instituto Goddard de Estudios Espaciales, de la NASA, dan una media de 15,38 grados centígrados. La diferencia está, asumida en los márgenes de error y se debe a una diferente combinación de registros, pero los resultados se consideran prácticamente iguales.El estudio británico muestra, además, que el periodo comprendido entre 1991 y 1995 ha sido más templado que cualquier otro intervalo de cinco años para los que existen registros, incluidos los años ochenta, la década más calurosa. Y esto, a pesar del efecto de enfriamiento que tuvo el polvo inyectado a la atmósfera por la erupción del volcán Pinatubo en 1991.Estos datos refuerzan el temor de los científicos de que la emisión de gases de efecto invernadero por el uso de combustibles fósiles está calentando el clima de la Tierra.Tanto el récord de alta temperatura en 1995 como en el registro templado del principio de los noventa "consistentes con las expectativas que tenemos acerca de la relación entre las influencias natural e inducida por el hombre sobre el clima", ha comentado Tom M. L. Wigley, del NCAR estadounidense.James Hansen, director del Centro Goddard, predijo el año pasado que !e alcanzaría un nuevo record global antes del 2000 y ahora ha declarado: "'Todavía alcanzaremos dos máximos más para esa fecha".
Las pocas centésimas de grado que marcan la diferencia de temperatura. media entre 1995 y 1990 pueden parecer insignificantes, pero representan un aumento apreciable desde el descenso registrado después de la erupción del Pinatubo, cuan do el polvo reflejaba parte de la luz solar hacia el espacio.
Los científicos habían estimado que la recuperación del efecto del volcán filipino se apreciaría el año pasado.
