Israel y Siria deciden seguir negociando en Estados Unidos para forjar un acuerdo de paz

, Las delegaciones de Israel y Siria decidieron ayer continuar ininterrumpidamente sus conversaciones en Estados Unidos, lo que ha sido interpretado como un síntoma de que la negociación está progresando hacia la conclusión de un acuerdo. Aunque no hay todavía una sola palabra oficial sobre los resultados de la reunión, el hecho de que los negociadores hayan decidido cambiar sus planes de viajar hoy a sus respectivas capitales ha sido considerado como un signo alentador por parte de los mediadores norteamericanos, que parecen estar sometiendo a las dos partes al mismo tipo de presión ambiental que sirvió en Dayton para conseguir un acuerdo de paz sobre Bosnia.

"Las negociaciones están siendo productivas y conducentes a mayores discusiones", dijo ayer John Dinger, un portavoz del Departamento de Estado norteamericano, al comunicar la decisión de sirios e israelíes de quedarse en el área de Washington durante los próximos días para "seguir hablando informalmente".El próximo miércoles, según los planes actuales, los negociadores volverán a reunirse en el Wye River, un centro de convenciones en una zona rural del Estado de Maryland, a una hora de la capital, también sin orden del día ni calendario decidido. Cuando esas negociaciones produzcan resultados concretos, el secretario de Estado norteamericano, Warren Christopher, se desplazará a Damasco y Jerusalén con intención de convocar una conferencia de paz.

Hasta que no llegue ese momento será difícil saber el alcance verdadero de las conversaciones de Maryland. Pero las indicaciones disponibles ayer apuntaban a la posibilidad de alguna forma de acuerdo que incluiría la devolución a Siria de los altos del Golán, ocupados por Israel en la guerra de 1967, a cambio de un convenio de seguridad que impida que ninguna nación pueda utilizar su suelo para acciones agresivas contra la otra.

En estos tres días de conversaciones las dos delegaciones han expuesto sus exigencias y preocupaciones principales. Fuentes norteamericanas no quisieron revelar el contenido preciso de lo tratado, pero aseguraron que las dos partes manifestaron abiertamente sus puntos de vista. De acuerdo a las escasas informaciones que han trascendido del encierro de Río Wye esta primera ronda ha servido para que cada país conozca las condiciones minorías que el otro pone para llegar a un acuerdo. Esas condiciones serán ahora examinadas por los respectivos Gobiernos. Los negociadores volverán a reunirse la próxima semana, en principio también por un periodo de tres días, para elaborar ya algún texto de acuerdo. Si eso es posible, Christopher intentará que el presidente sirio, Hafez el Asad, y el primer ministro israelí, Simón Peres repitan pronto el apretón de manos que Isaac Rabin tuvo con el líder palestino, Yasir Arafat, y el rey Hussein de Jordania.

Un acuerdo entre Siria e Israel despejaría casi por completo el camino para un compromiso similar entre Israel y Líbano, y abriría la puerta a la reconciliación de Israel con todo el mundo árabe. Líbano está actualmente ocupado por más de 30.000 soldados sirios, y su Gobierno es prácticamente un satélite de Damasco, que ejerce sobre Líbano una influencia basada en reclamaciones históricas. El camino de la paz, sin embargo, está sembrado de obstáculos. La guerrilla proiraní de Hezbolá lanzó ayer desde el sur de Líbano varios cohetes katiusha que causaron daños materiales en el norte de la región israelí de Galilea, según informaron fuentes policiales. Horas antes, los disparos de la artillería israelí habían causado1a muerte de un miliciano y herido a vanos civiles en el sur de Líbano.