Chirac y Kohl fijan a González las metas a alcanzar en la cumbre de la UE en Madrid
Los dirigentes de Francia y Alemania proponen "completar la creación de un espacio común europeo que garantice la libre circulación de los ciudadanos". Esto exige una acción conjunta en cuestiones de emigración y asilo. Para, hacer más eficientes las instituciones europeas consideran imprescindible introducir Cambios. fundamentales en el funcionamiento del Consejo Europeo y en la Comisión.En concreto, proponen la introducción de la toma de decisiones por mayoría cualificada con una ponderación de los criterios Vigentes. Además, se sugiere que se efectúen nuevas reflexiones sobre el nombramiento, composición y tareas de la Comisión. Para lograr una mayor proximidad a los ciudadanos, tiene que asegurarse una mayor democratización. Por eso, Kohl y Chirac reclaman que los parlamentos nacionales y el europeo se integren más en el proceso de integración.
Los dos mandatarios se fijan como objetivos que en los próximos cinco años se complete la adaptación del tratado sobre la unión europea: realizar, según los plazos, la transición hacia una moneda única observando los criterios fijados; llevar adelante las negociaciones de ampliación con los países del centro y del este! de Europa, y con los candidatos del Mediterráneo de forma constructiva y decidida; fijar los parámetros más importantes para la financiación de la política común más allá de 1999, y continuar, de forma activa el diálogo cooperación con los países vecinos de la UE, sobre todo con Rusia, Ucrania, Turquía y países del Mediterráneo.
Chirac, cuyo primer ministro, Alain Juppé, no le acompañó a Baden-Baden debido a la revuelta en Francia, confesó en una conferencia de prensa conjunta al término del encuentro sentirse optimista pese a la crisis que vive su país y declaró que su política en la luca contra el déficit no estaba motivada, "por el Tratado de Maastricht", sino por "la adaptación de las estructuras de Francia a un verdadero combate contra el paro y el retorno a la cohesión social". Preguntado sobre "el deterioro social" que vive Francia, Kohl declaró: "Comprendo perfectamente que el presidente y el Gobierno franceses en esta situación dramática, consecuencia de los cambios en Europa, y en el mundo, hagan todo lo que sea necesario para preparar a Francia para el futuro. Ha que mantenerse firme si se está convencido de que una política es justa".
A la cumbre franco-alemana, la precedió un debate en el Parlamento Federal (Bundestag) en Bonn sobre la próxima cumbre europea de Madrid. Kohl calificó de "cuestión de supervivencia" para Alemania la política de unidad europea. Dijo el canciller: "Lo repito de forma absolutamente consciente: en realidad es una cuestión de guerra o paz".
Kohl se había referido antes en su intervención a los recelos que hoy día despierta Alemania en Europa: "Lo queramos o no, somos el país más grande y económicamente más fuerte en el corazón, de Europa y no podemos pasar por alto las cargas latentes de nuestro pasado reciente, que todavía se mantienen presentes. A esto se añaden sentimientos de envidia y celos"' Según el canciller, "no debemos engañarnos: persisten los temores reales a la vista del tamaño de la Alemania unificada".
Política sin retorno
Para Kohl, una política alemana que no mantenga los objetivos de la unidad europea "sería irresponsable" y "no hay retorno a las políticas de dominación nacional".
Tanto Kohl como Chirac no desvelaron si se habían puesto de acuerdo sobre el nombre de la futura moneda europea y la fecha sobre la selección de países que podrán acceder a la unión monetaria. Ambos temas deberán ser resueltos en Madrid. "Necesitamos la unión económica y monetaria", dijo Kohl. Los motivos, según el canciller alemán, son: fortalecer Europa ante el desafío, de la competencia global, la culminación del mercado común interior, la conservación y creación de puestos de trabajo y el fortalecimiento del peso de Europa,en el. sistema monetario internacional. Para eso se exige, dijo Kohl, "estabilidad y convergencia duraderas de los países asociados", y se felicitó de la acogida favorable al plan , de estabilidad presentado a los socios europeos por el ministro alemán de Finanzas, Theo Waigel, el mes pasado.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
- Helmut Kohl
- RFA
- Euro
- Jacques Chirac
- Política monetaria única
- Declaraciones prensa
- Ampliaciones UE
- Consejo Europeo
- Adjudicación contratos
- Alemania
- Moneda
- Francia
- Madrid
- Contratos administrativos
- Comunidad de Madrid
- Derecho administrativo
- Ayuntamientos
- Europa occidental
- Política exterior
- Gobierno
- Gente
- Unión Europea
- Organizaciones internacionales
- Europa
- Administración Estado