_
_
_
_

Más de 50.000 españoles viven deambulando por las calles

Congreso en Madrid de los 'sin techo' de la Unión Europea

Más de 50.000 personas viven deambulando por las calles de las ciudades españolas según los datos presentados ayer en Madrid ante el tercer congreso internacional de los sin techo que se inauguró bajo el lema ¿Dónde dormir esta noche? ¿Dónde vivir mañana? Simposio paradójico, pues al margen de las penalidades de los innumerables mendigos que deambulan por el barrio, los participantes lucen un aspecto bastante orondo, se alojan en hoteles de cuatro estrellas, han pagado una cuota de inscripción de 260 ecus por barba -unas 40.000 pesetas-, y amenizan sus sesiones con abundantes almuerzos y cenas de trabajo.

Todo para el homeless pero sin el homeless, podría ser el eslogan del congreso de los sin techo inagurado ayer en Madrid, pues poco transeúnte andaba por allí, tan sólo un par de ellos que ex ponían sus manualidades en una urna de metacrilato, y los de la revista británica The Big Issue y el INST (Red Internacional de Periódicos Callejeros). Según afirman los responsables de La Farola, el periódico español de los sin techo, ellos no estuvieron presentes porque no pudieron re colectar los 260 ecus de la inscripción.Organizado por FEANTSA, entidad francesa dedicada la promoción de la población des favorecida y por Cáritas ha con tado en cambio con una importante afluencia -unos 300- de representantes de instituciones públicas de los quince países de la Unión Europea que trabajan con transeúntes.

Desarraigo familiar, exclusión social, graves problemas personales, falta de recursos eco nómicos, desempleo continuado y soledad, son las características de los integrantes de este colectivo que cuenta ya con 2,5 millones de personas en la UE. En España, según Caritas, los sin techo son ya 50.000.

Vivienda digna

"Los estudios demuestran que es posible proporcionar vivienda digna a toda la población de la UE", explica Anne de Gouy, vicepresidenta de FEANTSA, "sólo es necesario que haya voluntad política de considerarlo como una prioridad". Por el momento no parece muy claro que exista esta voluntad política, pese a que tal y como advierte la presidenta de FEANTSA, resulta mucho más caro olvidarse de la prevención y afrontar más tarde las consecuencias sociales.

Natividad Casanova, responsable del programa de transeúntes y colectivos sin techo, de Cáritas Española, también hace hincapié en la prevención, achaca el aumento del problema a una multiplicidad de factores, entre ellos el alcoholismo y la desintegración del entorno familiar. También aboga por centros de acogida a medio plazo, donde los sin techo tengan ocasión de replantearse las cosas y capacitarse para la vida laboral. Para otro tipo de transeúntes, con posibilidades prácticamente nulas de integración, propugna albergues permanentes con actividades simplemente terapéuticas que favorezcan la comunicación entre ellos. Construcción de viviendas sociales, salario de integración y atención personalizada para cada caso, parecen ser las medidas más eficaces para mitigar este fenómeno, medidas que no están en la mente de los planificadores económicos. No sólo se constata una disminución de la oferta de la vivienda social, subrayan los expertos, sino que se aprecia una tendencia al crecimiento del mercado de la vivienda privada con un encarecimiento del precio de la misma. Por eso, en las conferencias se escuchaban voces pidiendo una "tercera vía" y otras arremetiendo contra el dios Mercado.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_