Ratificada la inocencia de 11 españoles acusados de narcotráfico en Venezuela

La juez superior Ana Mota, del Tribunal IV Penal de Barcelona (Venezuela), dictó ayer la absolución definitiva de los 14 marineros del buque Monte Blanco -11 españoles y tres venezolanos-, lo que ratifica su inocencia total de un presunto delito de narcotráfico. El mismo veredicto fue dictado en primera instancia hace un mes.

La esperada sentencia cayó, como la noticia más feliz en la vida de los marineros. Al ser anunciada por los abogados defensores, Antonio Barrios y Fernando Mirabal, la tripulación entera, que se encontraba en libertad condicional desde el 13 de octubre en una residencia de Puerto La Cruz, al noroeste de Venezuela, estalló en llantos y risas con ansiedad de volver cuanto antes a España y olvidar la pesadilla vivida. En la celebración de los abrazos y los emotivos gritos de "¡Somos libres!" corrió la cerveza y el cubalibre sin parar.

Con el dictamen absolutorio definitivo se cumplen ocho meses de un largo y traumático proceso, iniciado a mediados de marzo pasado cuando la Armada venezolana detuvo al buque atunero y su tripulación en el puerto de Guanta al descubrir 1,8 kilos de cocaína pura en el interior del mástil principal del Monte Blanco.

"Estamos felices porque finalmente se hizo justicia. Se demostró nuestra inocencia", afirmó el capitán del buque, Miguel Ángel Pena Lamas, de 38 años, a la salida del penal de Barcelona el pasado 13 de octubre. En el fondo, los marineros españoles guardan malos recuerdos de su estancia de ocho meses en uno de los peores y más peligrosos penales de Venezuela, que por algo recibe el nombre popular de El infierno de Puente Ayala.