El Gobierno se queja de que aún hay conflictos autonómicos de hace 10 años en el Constitucional

El secretario de Estado de Administración Territorial, Francisco Peña, lamentó ayer la lentitud del Tribunal Constiltucional sobre cuestiones autonómicas. Los asuntos acumulados en el alto tribunal son 167. De ellos, tres datan de 1985 y uno de 1986, según la memoria del tercer trimestre del año sobre conflictividad autonómica que presentó el secretario de Estado. Unas sentencias con tanto retraso pueden quedar caducas, se lamentó Peña.

Francisco Peña atribuyó esta lentitud a que el Tribunal Constitucional "ha dado preferencia a otros temas". "Sus razones tendrá", añadió. Desde 1990 se estaba produciendo un espectacular desatasco en los asuntos acumulados -según refleja el cuadro- que ha sufrido una paralización este último año.No obstante, el secretario de Estado presentó un balance optimista de la evolución de la conflictividad. Con 18 impugnaciones en 1994 -4 por parte del Estado y 14 por las comunidades autónomas- sería ésta la segunda cifra más baja desde 1993, cuando se contabilizaron 16 inipugnaciones. En los nueve primeros meses de este año se han producido ocho impugnaciones -siete el Estado y una de la comunidad autónoma de Asturias- El contraste es especialmente llamativo si se compara con la década de los 80, cuando la media anual era de 83 asuntos impugnados.

Peña atribuyó la reducción de la conflictividad al reforzamiento de la cooperación entre el Estado y las comunidades autónomas; a la aplicación más rigurosa de los ámbitos competenciales respectivos, y a la consecución de acuerdos extraprocesales para retirar asuntos del alto tribunal.

El secretario de Estado se refirió también a las consecuencias del rechazo parlamentario de los Presupuestos para 1996. A su juicio, hay "serias dudas" de que pueda aplicarse la cesión del 15% del IRPF a las comunidades autónomas. Dijo también que ignora a qué comunidades autónomas puede ser aplicable la cesión, ya que ninguna ha solicitado aún la preceptiva convocatoria de la Comisión Mixta de Transferencias.

Según Peña, el rechazo de las cuentas de 1996 va a provocar un aumento del endeudamiento de las autonomías. A su juicio, se ha producido una "falta de sintonía" entre los líderes nacionales del PP, que rechazaron los Presupuestos, y los responsables de las 10 comunidades gobernadas por este partido, que piden que se aplique las previsiones presupuestarias sobre inversiones en sus respectivos territorios.