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Entrevista:

"Hay una obsesión por los restos humanos"

Clark Howell es un caso especial en la paleontología humana. Ha conseguido ser conocido y respetado, sin haber encontrado nunca fósiles, espectaculares, en una ciencia en la que los nombres propios aparecen unidos a cráneos y a yacimientos estrella. Es legendaria su habilidad para elegir los mejores sitios para excavar, y dirigió, a finales de los setenta, un equipo que reunía a los que luego fueron famosos paleoantropólogos: Donald Johanson, descubridor de Lucy, y su archirival, el keniata Richard Leakey. Director de excavaciones en Etiopía (río Omo), Turquía y España, fue aquí, en Torralba-Ambrona (Soria), don de pasó a los libros de texto, al organizar el primer equipo arqueológico moderno formado por geólogos, paleontólogós,arqueólogos y otros especialistas españoles, en diferentes disciplinas. En Torralba descubrieron que hace 300.000 años el Homo erectus europeo cazaba elefantes y caballos y usaba el fuego, aunque no encontraron ni un solo resto humano. Howell sigue colaborando con científicos españoles desde su cátedra en la Universidad de California (EEUU). Hace poco estuvo. en España., en un congreso de su especialidad. Pregunta. ¿La investigación en paleontología ha cambiado mucho en las últimas décadas?

Respuesta. Ha cambiado lo que estamos dispuestos a aceptar. A lo largo de los años, y debido a los cambios en todas las ciencias, cada vez esperamos más información. Los criterios son cada vez más estrictos. Cuando afirmas algo debes saber por qué, y debes considerar las alternativas. Pero lo más importante es el esquema general con el que trabajamos ahora, porque no vale con estar seguro de algo, hay que probarlo. Es cuestión de documentación, de pruebas científicas.

P. ¿Qué, se sabe y qué queda por saber sobre la llegada del hombre a Europa?

R. Hemos aprendido mucho en los últimos 20 años sobre bioestiratigrafía y fechas, pero hay. mucho trabajo por hacer.

P. ¿No hay una obsesión por encontrar restos.humanos, que a veces causa problemas en la investigación?

R. Sí, hay una verdadera obsesión. No es fácil llegar a un yacimiento y encontrar homínidos. Hace falta mucha paciencia, trabajo duro y buena suerte. No es frecuente encontrar un yacimiento como la Sima de los Huesos de Atapuerca [Burgos].

P. Usted trabajó en España durante mucho tiempo.

R. A Torralba llegué en 1960, sin hablar ni palabra de español. Me resultó dificil empezar, pero exploramos todo el valle y encontramos algunas piezas en superficie, así que volví al año siguiente. Trabajé allí siete años en total. En 1961 redescubrimos el yacimiento de Ambrona, porque uno de los trabajadores vivía allí, a sólo dos kilómetros de Torralba, y nos dijo que podía enseñarnos huesos saliendo de la tierra en su finca. El yacimiento ya aparecia mencionado brevemente, en el libro El hombre fósil, publicado en 1925 por, Hugo Obermaier. Allí había excavado el marqués de Cerralbo [un pionero de principios de siglo].

P. Usted desarrolló aquí el primer equipo de excavación moderno.

R. Claramente, ésa era la dirección a seguir: reunir a diferentes especialistas para trabajar en conjunto. Los españoles continuaron y desarrollaron un pro grama de investigación realmente internacional y un equipó de Neógeno y Cuaternario muy potente. Esta. época es muy importante pero mal conocida,y España es uno de los sitios con enorme potencial.

P. ¿Hay mucha diferencia en la ciencia española entre aquella época y hoy en día?

R. En los años sesenta, mucha gente en España no tenia forma de ir a la universidad 0 de conseguir trabajo. En los setenta se inició un cambio y se produjo un gran crecimiento en los primeros ochenta. Ahora España es muy potente en ciencia, y los científicos españoles son de primera clase mundial.

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