Los líderes de la oposición piden prudencia y sus grupos estudian boicotear al ex ministro

, Reacciones esperadas a una decisión largamente deseada. La respuesta de algunos políticos a la petición de Eduardo Móner de tramitar el suplicatorio contra José Barrionuevo se centró ayer en la "gravedad de que se trata de un miembro del Gobierno", como si ayer se hubiera desvelado por primera vez el nombre del ex ministro del Interior y hubiera supuesto alguna sorpresa tal posibilidad.Dirigentes como José María Aznar, presidente del PP, apelaron a la "tranquilidad y la calma" para estudiar la decisión judicial que se acababa de conocer. También el lehendakari José Antonio Ardanza demandó prudencia que se dejase actuar primero a los jueces . "Después, los demás podremos opinar". Jordi Pujol trató igualmente de no opinar "en caliente" sobre el tema, aunque no negó que su formación votaría a favor del suplicatorio si se tramitase. Igual haría el Partido Nacionalista: Vasco, según un comunicado de este partido.

Pero, por encima de la prudencia y la calma de las declaraciones de los líderes, la práctica totalidad del espectro político reaccionó a la petición del juez Móner con verdadera dureza verbal. Los anatemas contra el ex ministro iban desde la "dimisión inmediata" que exigía Rosa Aguilar (IU), hasta la propuesta del PNV de no acudir a la comisión parlamentaria que el lunes presidirá Barrionuevo.

Nadie va a esperar al suplicatorio para mostrar lo que de verdad creen y opinan los grupos sobre el ex ministro del Interior, independientemente de lo que diga una Posterior sentencia. Barrionuevo experimentará a partir de ahora el vacío entre sus compañeros parlamentarios. El PNV ha anunciado ya que no asistirá a la sesión de la Comisión Constitucional, convocada para el lunes, si la preside el ex ministro. Otros grupos estudian si adoptan esa misma decisión. Es. el caso del PP, al que la idea del PNV no le parece desacertada. Y Rosa Aguilar, portavoz del grupo parlamentario IU-IC, que ayer exigía la dimisión del parlamentario socialista, no descartaba tampoco que su formación dé plantón a Barrionuevo quien empezaría el mismo lunes su particular calvario.

Y González también

No sólo él. Rosa Aguilar sentaba en el banquillo también a Felipe González, al que, en su opinión, la posible petición que tramitará el Tribunal Supremo le hace corresponsable. No era la única que sustentaba esta tesis. Francisco Álvarez Cascos, del PP mostraba su satisfacción porque "hoy lo tienen mucho peor el PSOE y el señor González para, a la luz de su teoría de vincular responsabilidades políticas a las penales, intentar eludirlas".

También Pilar Rahola, de Esquerra Republicana, tras decir que se trataba de "una noticia "de gran trascendencia política", remachaba con la afirmación de que la petición de suplicatorio. mancha directamente a González".

Carlos Garaikoetxea, presidente de EA, apuntó como gran incógnita "si [el suplicatorio] va a ser único o va a tener una secuencia posterior". Y aunque aseguraba que Móner "no va a necesitar de estímulos ni opiniones ajenas", recordaba también que su opinión es que la cosa llegue más arriba".

Diego López Garrido, de IU, calificaba de "coherente y lógica" la decisión del juez Móner. Y Mariano Santiso, también de IU, destacaba que, además, la petición de suplicatorio "permitiría al propio Barrionuevo su defensa". Tras ellos, el coordinador general de la coalición, Julio Anguita, anunciaba que su grupo votará a favor del suplicatorio, aunque, prudente como otros líderes, no quiso pronunciarse sobre si el instructor debe o no plantear más. "Yo no estoy en la mente del juez".