"A Buñuel le molestaba que sus películas dieran dinero"

Un extraño en la escalera, de Tulio Demicheli la convirtió en gran estrella del cine mexicano para después pasar a ser asociada inevitablemente con la filmografía de Luis Buñuel que la incluyó en tres de sus películas (Viridiana, El Angel Exterminador y Simón del desierto). Las tres figuran en el homenaje que la Mostra de Valencia rinde a Silvia Pinal en su XVI edición, de cuyo jurado internacional la actriz es, además, presidenta.

Pregunta. ¿Puede evitar Ponerse en el lugar de un actor o una actriz cuando juzga una película?

Respuesta. Es otro tipo de responsabilidad. En un caso compites, en el otro juzgas. Lo que cuenta es el resultado. Cómo lo hacen o qué hacen para hacerlo, ¿o se debe tomar en cuenta.

P._¿Se ha alejado de los platós cinematográficos?

R. Nunca he dejado de estar en activo. Cuando vuelva a México seguiré con Hello, Dolly, un musical, y tengo un programa de televisión, entre otras cosas En cine dejé de trabajar durante un tiempo porque las películas que se estaban haciendo buscaban gente nueva e importaba mucho quién dirigía la película. Después volvieron a hacer películas para estrellas y allí ya encajé yo. Pero está mal el cine. Pagan muy mal y los papeles no son tan buenos.

P. ¿Cuál es su implicación actual en -la política mexicana?

R. Fui diputada y ahora soy asambleísta por el PRI. Me siento con una gran responsabilidad. Es una época muy difícil, con una desconfianza de la gente, falta de credibilidad en la política, como sucede en otras partes. Parece ser que nos picó el mismo bicho a todo el mundo y yo creo que el remedio puede estar en la honestidad, el trabajo. No vamos a salir de la situación de otra forma.

P. ¿Podría describir a Buñuel con pocas palabras?

R. Lo definiría como un genio macabro.

P. Francisco Rabal.

R. A. Paco. Rabal lo definiría como una bella bestia.

P. Fernando Rey.

R. Un caballero encantador.

P. ¿Cuál es el momento más inolvidable de su carrera?

R. Fue la fiesta final del Festival de Cannes. Allí me presentaron como Mademoiselle Viridiana. Significaba que el personaje creado por Buñuel se había incrustado definitivamente en mí.

P. Pero su aterrizaje en Cannes no, fue tan maravilloso.

R. Para nada. Llegamos a Cannes con la historia de una monja hecha bajo la censura de Franco. No esperaban mucho de ella. y nos dieron el último día de. exhibición. Buñuel se enfadó muchísimo. Pero todos los penodistas salieron diciendo que era una bomba. En Le Soir, salió Fa foto de la última cena de los mendigos en portada, fue impresionante. Las autoridades españolas ordenaron que se quemara todo lo que existiera en el estudio.

P. Pero la película se salvó.

R. Conseguimos salvar el copión, que se llevó a la finca de los Dominguín. Yo saqué fuera de España los nueve rollitos de la película, sin latas y en mano.