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GUERRA EN LOS BALCANES

La falta de electricidad en Sarajevo amenaza con demorar el alto el fuego

ÁNGEL SANTA CRUZ ENVIADO ESPECIAL, Las Naciones Unidas y el Gobierno de Sarajevo admitían ayer implícitamente que a medianoche del lunes la capital bosnia no podrá recibir el pleno suministro eléctrico, una dé las precondiciones del acuerdo de cese de hostilidades firmado el jueves por los beligerantes ante la presión diplomática de Estados Unidos. Mientras se deshoja la margarita de un eventual retraso en la entrada en vigor del armisticio de dos meses, tanto las tropas de los aliados musulmanes y croatas como las de los serbios de Bosnia aprovechan para consolidar sus líneas antes de que se imponga el silencio de las armas.

Los combates eran ayer intensos en el norte y noroeste de Bosnia y al sur de Banja Luka. Aviones serbobosnios lanzaron una bomba sobre el área de Bihac, pero funtes bosnias aseguraron que no se habían registrados víctimas. Las tropas de Sarajevo continúan avanzando hacia Dobo1 junto al macizo de Ozren, en el norte del país, donde el Ejército gubernamental ha ganado alrededor de 50 kilómetros cuadrados a sus enemigos. La caída de Doboj, ahora en poder de las fuerzas de los rebeldes serbios, daría al Gobierno de Sarajevo un importante punto de palanca sobre el lado occidental del estratégico corredor de Posavina, que por Brcko comunica las dos mitades de los territorios serbobosnios .En Kljuc, otra zona donde en las últimas horas las Naciones Unidas ha detectado intensos movimientos militares, son por el contrario hasta 2.000 soldados del VII Cuerpo del Ejército bosnio los que acuden a detener una importante contraofensiva de las tropas del general Ratko Mladic, que intentan reconquistar la ciudad perdida el mes pasado. Observadores de la Unión Europea desmintieron ayer que Kljuc hubiese caído en manos serbias, como afirmó el viernes el cuartel general serbobosnio. En Bosanska Krupa, junto a Bihac,. centenares de soldados croatas han cruzado la frontera para detener junto con el V Cuerpo bosnio los ataques serbios.

Como ha venido sucediendo habitualmente en Bosnia antes (le cualquier, alto el fuego, los beligerantes intentan consolidar sus ganancias o bloquear los avances enemigos antes de que , sus jefes políticos se vean la cara en una mesa de negociaciones. Esta vez, sin embargo, el cese de hostilidades puede ser el definitivo. Según la agenda de Washington, cuya diplomacia ha tomado por completo las riendas del conflicto bosnio, las conversaciones que los líderes de Bosnia, Croacia y Serbia iniciarán a finales de mes en Estados Unidos pueden echar el definitivo telón a la guerra en los Balcanes. Si es así, el presidente Bill Clinton solemnizará el histórico acuerdo con un viaje a Sarajevo antes de que acabe el año. En Washington no estarán las dos cabezas de los ultranacionalistas serbios de Bosnia, ni, a partir de hoy, en ningún otro lugar fuera del territorio que controlan. El Tribunal de La Haya que investiga los crímenes de guerra en la antigua Yugoslavia emitió ayer una orden de captura contra Radovan Karadzic, presidente de la todavía autoproclamada República Serbia de Bosnia, y su comandante en jefe, general Ratko Mladic, a los que ha encausado como presuntos criminales de guerra. La policía internacional debe detenerlos si intentan poner pie fuera de su territorio. Los intereses de Pale estarán representados por el presidente de Serbia, Slobodan Milosevic, junto con dos asesores serbobosnios.

Obstáculos croatas

Pese a la promesa del presidente croata, Franjo Tudjman, al mediador estadounidense, Richard Holbrooke, de comprometerse plenamente con el acuerdo de cese de hostilidades a partir del martes, sus fuerzas en Bosnia, el denominado Consejo de Defensa Croata o HVO, están obstaculizando su cumplimiento. La parte croata, que por su dominio del territorio donde han de hacerse las reparaciones para reanudar el. suministro eléctrico a Sarajevo es clave en su éxito, no tiene ninguna prisa por limpiar de minas el kilómetro de tierra de nadie en torno a Kiseljak al oeste de la capital, que permitirá a los ingenieros de las Naciones Unidas trabajar contra reloj hasta la medianoche de mañana. La parte croata no compareció ayer a una reunión de los tres bandos en el aeropuerto de Sarajevo para facilitar las reparaciones.

Croacia, como tal Estado, no ha firmado el documento que re coge las condiciones del cese de hostilidades en Bosnia, pero sí el líder bosnio Alia lzetbegovic en nombre de Kresimir Zubak, el presidente de la federación de musulmanes y croatas de Bosnia, obediente a Zagreb. Zubak estaba de viaje cuando el mediador Ho1brooke se plantó el jueves en Sarajevo con la luz verde de los serbios a las condiciones del Gobierno bosnio para el alto el fuego. El emisario de Clinton viajó a la capital croata para informar al presidente Tudjman y obtener su apoyo.

Según los términos del compromiso, el cese de hostilidades debe entrar en vigor en Bosnia un minuto después de la medianoche del lunes, si para entonces su capital dispone de "pleno suministro de gas y electricidad". La interpretación de la palabra "pleno" está en manos del Gobierno bosnio, pero, en cualquier caso, está técnicamente descartado que pueda ser así. Los expertos que trabajan en los tendidos cerca de Kiseljak consideran realsta un plazo mínimo de hasta mediados de la próxima semana para restablecer el suministro.

Fuentes solventes de las Naciones Unidas creen que el Gobiernbosnio se dará o no por satisfecho en la cuestión eléctrica en función de la situación en los frentes de batalla. Y lo mismo rige para Croacia, cuyo interés en facilitar o no el comienzo del armisticio está exclusivamente relacionado con los porcentajes territoriales en manos de los soldados del Consejo de Defensa Croata en los días inmediatos.

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