Los laboristas denuncian un pacto Londres-París sobre las pruebas nucleares
El Foreign Office lo ha negado rotundamente, pero la ponzoñosa sospecha está destinada a envenenar sus relaciones con los países del Pacífico sur miembros de la Commonwealth. Según David Clark, portavoz de Defensa laborista, el Gobierno británico está colaborando secretamente con el programa nuclear francés.
Clark, que cita fuentes de la mesa negociadora para la prohibición de las pruebas nucleares en Ginebra, acusa al Gobierno conservador de mantener un programa de intercambio informativo en asuntos nucleares con Francia. Incluso, Londres podría estar contribuyendo económicamente con este proyecto.
Lo cierto es que el Reino Unido se ha mostrado particularmente neutral frente a la polémica decisión del presidente Jacques Chirac de reanudar las explosiones nucleares. Al contrario que en la guerra del fletán entre Canadá y España, cuando una oleada de solidaridad fraterna sacudió al Gobierno de Londres en apoyo de Canadá, en esta ocasión ha respondido con el más absoluto silencio a las peticiones de Australia y Nueva Zelanda.
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