El empleo medido por la EPA crece en 60.000 personas al año al aplicarse el nuevo censo
La amenaza de polémica se cierne de nuevo sobre las estadísticas españolas, Concretamente sobre la medición del empleo. El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha iniciado desde enero de 1995 un cambio metodológico en el cálculo de la Encuesta de Población Activa (EPA), cuyo principal resultado, según los expertos, es un aumento en el número de empleados de unas 60.000 personas de media anual. Este, hecho confirma que el empleo en España estaba infravalorado, pero producirá una pérdida de ritmo del empleo en 1996. El INE hará una evaluación definitiva del cambio metodológico en diciembre de este año, cuando se establezcan las comparaciones de los tres primeros trimestres.
El denominado "cambio metodológico" para determinar la población activa, ocupación y empleo en la EPA, consiste en realizar las encuestas según el nuevo Censo de Población elaborado en 1991. Con el nuevo censo, las secciones censales que se eligen para obtener las respuestas se aproximan a las que cuentan con mayor actividad, reducen el número de viviendas sin habitar, por ejemplo, y tienen en cuenta zonas con establecimientos recientes. El mero hecho de renovar el censo, aseguran algunos expertos, aumenta la probabilidad de que suba la ocupación.Algunos expertos económicos han evaluado ya los efectos que tendrá el cambio de censo en la EPA. Según la nota interna elaborada en AB Asesores por José Luis Feito, el empleo subirá este año en tomo a 60.000 personas en media anual por efecto de esta renovación censal (gráfico adjunto). Este cálculo es una media. Para el primer trimestre, Feito calcula el aumento del empleo derivado del cambio estadístico en unas 30.000 personas. Es decir, de los 90.070 empleos creados por la economía española, según la EPA, entre enero y marzo de este año, unos 30.000 serían atribuibles a la mejora en el método de medida del empleo. En el segundo trimestre, en el que se crearon 167.330 puestos de trabajo, el impacto habría sido menor.
En esta opinión coinciden otros expertos, entre ellos varios del Grupo de Expertos económicos que analizan la coyuntura española con carácter semestral, que también coincide en las cifras. Julio Alcaide, portavoz del Grupo, ya avanzó en el último informe el cambio metodológico, Medios del Grupo explicaron que el efecto del cambio del censo "en ningún caso puede considerarse un fraude estadístico; es una mejora evidente".
El INE ha reaccionado con presteza. Fuentes autorizadas informaron que publicará a finales de este año un estudio en el que se recogerá con exactitud el efecto que en la creación de empleo haya podido tener el cambio censal". Para elaborar este estudio, es necesario comparar durante tres trimestres la evolución de la actividad y el empleo con los datos antiguos y los nuevos.
La elaboración de la encuesta se realiza en dos etapas. En la primera, se selecciona un número determinado de secciones censales (áreas o zonas de población); en la segunda se eligen las familias dentro de cada área. Cuando se elabora un censo, algo que sucede todos los años que terminan con la cifra uno, la EPA modifica (en este caso, con un retraso de cuatro años) sus secciones censales, de acuerdo con los nuevos datos. El cambio se hace a un ritmo de un sexto de secciones censales cada trimestre. Es decir, el cambio total dura 18 meses. Las nuevas secciones se iniciaron en la EPA del primer trimestre de 1995 y acabarán de incluirse en la Encuesta del segundo trimestre de 1996.
Fuentes del INE precisaron que el cambio censal puede suponer un aumento de unos 40.000 empleos en el primer trimestre, aunque precisaron que la cifra no es extrapolable al resto del ejercicio y que no parece superior, a falta del estudio detallado que se conocerá en diciembre, al efecto producido por otras modificaciones en las secciones censales no producidas por el Censo de Población. "En todo caso", precisaron, "el empleo aflorado no es ficticio, es real; lo que sucede es que se han mejorado los sistemas de medida del empleo".
Los expertos consultados coinciden en que el cambio metodológico "es una mejora de la Encuesta" y, por lo tanto, un sistema "más afinado para detectar el empleo". De paso, añaden, "confirma que el número de ocupados en España se ha venido calculando por debajo de sus niveles reales". El nuevo método, según los expertos y el INE, aumenta el nivel de empleo y, en menor medida, la tasa de población en edad de trabajar; pero no afecta a la tasa de paro.
Las derivaciones políticas del nuevo censo (obstaculizado activamente en su día por el PP) y su efecto sobre la EPA son objeto de algunas conjeturas. La más evidente es que un reforzamiento en la mejora del empleo este año por cambio estadístico producirá por comparación en 1996, a partir de julio, un parón en el ritmo de creación de empleo, puesto que ya habrá acabado el efecto positivo del cambio de secciones.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.