"En Madrid pasas el día luchando contra la ciudad"

Era un Madrid acogedor donde sobrevivir no costaba la vida y el dinero se guardaba en las arcas de la solidaridad. Era el rompeolas de las Españas, cita Pedro Costa parafraseando a Machado para describir la ciudad que le sedujo en 1962 y en la que provisionalmente ha visto pasar 33 años. Tiene 54, dejó Barcelona para aprender cine y se entregó con pasión al periodismo de sucesos. Su carrera como director y productor en la pequeña y gran pantalla, persigue una huella roja y negra, la del crimen. En célebres matanzas se basaron La huella del crimen o El caso Almería. Ahora ha dirigido -y estrenado ayer- Una casa en las afueras, basada en un suceso espeluznante.Pregunta. Parece gustarle mucho más aquel otro Madrid.

Respuesta. En los sesenta, llegamos de toda España quienes queríamos hacer algo importante. Desayunabas con un poeta, vivías con un pintor, charlabas con periodistas y escritores, pasabas un rato en el Café Gijón y alguien te invitaba a comer. Todos los ojos y oídos, estaban abiertos y la pobreza no era un problema.

P. El barrio de la Concepción fue su primer domicilio.

R. Alquilé un apartamento muy pequeño porque seguía pensando en volver a Barcelona. La provisionalidad se prolongó durante 33 años.

P. ¿Por qué?

R. Porque soy un exiliado político. La visión de la derecha catalana, de Convergéncia i Unió, me impide vivir allí. Han convertido Cataluña en un lugar inhóspito donde el resto de España no interesa. Cataluña ha perdido el monopolio cultural y Madrid empieza a parecerse a las grandes urbes, con todos sus inconvenientes y ninguna de sus ventajas.

P. Lo que más le incomoda.

R. La incomunicación y la insolidaridad. La frase mas común entre los amigos es la siguiente: "A ver si nos vemos". Y necesitas dos semanas para concertar una cita. En Madrid empleas el día en luchar contra la ciudad.

P. Usted siempre lleva a la pantalla hechos reales.

R. Ni el mejor novelista puede inventar una historia que supere a un hecho real. Las cosas ocurren y se pueden contar bien o hacer un bodrio. Ocurre con un reality show, género que defiendo.

P. ¿Podría dibujar una ruta negra de Madrid?

R. Una tintorería de la calle de Orense siempre será el lugar donde detuvieron a El Jarabo. En 1915, el capitán Sánchez cometió sus crímenes junto a la plaza del Conde de Barajas. Al pasar por el hotel Miguel Angel, me acuerdo del americano que troceó a aquella prostituta. En la zona de chabolas cerca de la plaza de Legazpi, las gitanas me recibían gritando: "¡Ahí viene el de El Caso!", y aireaban camisas manchadas de sangre.