Clinton justifica la ofensiva croata frente a la postura de condena de los aliados de EE UU
La gran ofensiva croata sobre Krajina ha generado una ola de preocupación intemacional, pero no una condena unánime. Hay grietas en el bloque occidental y en el Grupo de Contacto. El presidente de EE UU, Bill Clinton, justificó la acción croata, en contra de la opinión de los demás países aliados, si bien hizo un llamamiento a la "máxima contención". Por su parte, el general Bernard Janvier, jefe de los cascos azules en la ex Yugoslavia, tras conocer la muerte de un militar danés por un disparo croata, amenazó a Zagreb con ataques aéreos, de la OTAN si se enfrentan a las fuerzas de la ONU.
Janvier dijo que la muerte del sargento danés Klaus Gamborg había sido un acto "deliberado",. El Gobierno croata se disculpo más tarde del suceso y el propio mando de las fuerzas danesas en la zona señaló que se había tratado de un "trágico error".Rusia -aliado tradicional -de los serbios- ha condenado sin ambages el ataque del Ejército croata, que considera irresponsable, pues "el -uso de fuerza en áreas habitadas por serbios -puede conducir a un cambio dramático en la naturaleza de los conflictos en la antigua Yu,goslavia", asegura un comunicado del Ministerio de Exteriores. Moscú acusa a Croacia de apostar todo a "la opción militar" en vez de "buscar una solución política".
Tanto el Reino Unido como Francia, que pertenecen al Grupo de Contacto -uno de los instrumentos mediadores que actúan en el terreno-, junto a Rusia, Alemania y Estados Unidos, ,-coínciden en condenar la ofensiva y en exigir que paren los combates. Ésa es también la tesis defendida por la Unión Europea (UE), aunque en su comunicado se evita la condena expresa de Croacia, no así la de los serbios de Krajina por sus ataques sobre el enclave bosnio de Bihac, "que ha contribuido al dramático empeoramiento de la situación". La UE se ha limitado a suspender las negociaciones en curso para un acuerdo Comercial.
Comprensión de Clinton
La postura más ambigua de todas ha sido la de Estados Unidos. El secretario de Defensa, William Perry, fue el primero en hablar, y lo hizo para decir que comprendía el disgusto croata con la actitud de los serbios en Bihac. El secretario de Estado, Warren Christopher, se vio obligado después a matizar la cuestión para asegurar que Washington no apoyaba la ofensiva. Y para añadir más-confusión el presidente Clinton, horas después, justificaba el ataque, aun cuando se mostraba "muy preocupado" por la posibilidad de una expansión de la guerra. "La acción ori ginal de Croacia estuvo provoca da por los ataques serbios -a Bihac, pero les hemos pedido que actúen con la máxima contención por el peligro que existe", afirmó. Fuentes oficiales dijeron que EE UU había dado su "consentimiento tácito" a la acción militar antes de que se iniciara.El mediador, europeo, Carl Bildt, además de condenar la acción de Zagreb, comparó al presidente croata, Franjo Tudjman, con el líder serbocroata, Milan Martic, considerado por la ONU un criminal de guerra. El plenipotenciario del secretario general de la ONU, Yasushi Akashi, pidió a -las partes el regreso a la mesa de negociaciones.En Belgrado- la noticia no ha sorprendido, pero representa una dura prueba sobre la firmeza de la postura del Gobierno. El presidente serbio, Slobodan Milosevic, antiguo arquitecto de la guerra de Croacia y de Bosnia y teórico de la Gran Serbia hoy reconvertido por el peso de las sanciones internacionales, condenó la ofensiva y solicitó la acción inmediata de la contunidad internacional. "Esto demuestra que Croacia se ha convertido en el mayor peligro para la paz en los Balcanes", aseguró.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
- William Perry
- Cascos azules
- Declaraciones prensa
- Conflicto de la Krajina
- Diplomacia
- Slobodan Milosevic
- OTAN
- Misiones internacionales
- Guerra Bosnia
- Croacia
- PESC
- Serbia
- Mediación internacional
- Acuerdos internacionales
- Proceso paz
- Estados Unidos
- Relaciones internacionales
- ONU
- Política exterior
- Unión Europea
- Gente
- Guerra
- Defensa
- Organizaciones internacionales
- Conflictos