Una mayoría de españoles cree perjudicial estar en la UE, según el Eurobarómetro

Hay más españoles (46%) que creen perjudicial la pertenencia a la UE que quienes la consideran beneficiosa (34%). España se ha colocado en cabeza de los euroescépticos, según los resultados de la última encuesta Eurobarómetro realizada en abril y mayo pasados y hecha pública ayer por la Comisión, tras sondear a 15.000 ciudadanos de los Quince, 1.000. por país. Los españoles no sólo son menos europeístas que la mayor parte de los ciudadanos de los otros 14 países de la Unión Europea, sino que lo son mucho menos que ellos mismos hace tan sólo un año.

Sólo en el criterio del europeísmo abstracto -la respuesta a la pregunta: "¿en general, está a favor o en contra de los esfuerzos que se hacen para unificar a Europa occidental?"- los españoles figuran, con un 77% de pronunciamientos favorables, entre los más entusiastas,. tras los italianos (8'5%), griegos (81%) y luxemburgueses (78%) y empatados con los irlandeses.Pero este sentimiento difuso se diluye al concretar los otros tres, grandes criterios. El 46% de los españoles cree que la pertenencia a la UE es perjudicial, y sólo el 34% cree que es beneficiosa, frente a una media europea del 48%. Figuran (con un 47%) bastante por debajo de la media (57%) en el apoyo a la pertenencia de su país a la UE, aunque sigan superando muy claramente a quienes están en contra (18%), ya que los que no se pronuncian constituyen, en toda la encuesta, una voluminosa tercera fuerza. En cualquier caso, es un resultado que sólo empeoran los británicos y los tres nuevos socios: suecos, finlandeses y austríacos. Sólo. un, 35% de los españoles lamentaría la disolución de la UE (la media es del 41%), aunque aún triplican (11 %)a los que quieren que desaparezca el club de los Quince.

Aún más: los españoles empeoran respecto a ellos mismos hace un año. Los que apoyan la unificación europea en abstracto siguen siendo abrumadoramente mayoritarios, pero descienden dos puntos, hasta el 77% y crecen un punto los que. están en contra (14%). Pero los otros tres criterios, más concretos, arrojan resultados más crueles para los europeístas.Disminuyen los satisfechos

El grupo de quienes creen que la pertenencia a la UE es una buena cosa desciende dos puntos porcentuales, y el de quienes opinan lo contrario aumenta cuatro respecto al año pasado. Y lo que es tan significativo como lo anterior: el número de satisfechos según este criterio es el más bajo desde que hace 10 años se firmó el Tratado de Adhesión, cuando alcanzó al 61% de la población, porcentaje que fue aumentando hasta 1991 (con el 78%) para iniciar desde entonces un continuado descenso.

También las respuestas a la pregunta de si el país ha extraído beneficios o desventajas de la pertenencia a la UE confirma el europesimismo rampante. Los optimistas bajan cinco puntos y los pesimistas suben tres. Desde 1989 hasta 1992 fueron mayoría (51%) los primeros.

El cuarto criterio, el eventual abandono del proyecto de la UE, ratifica los anteriores. Quienes lo lamentarían bajan siete puntos, y quienes lo celebrarían crecen cinco, casi se duplican, bien es verdad que hasta un todavía pequeño nivel del 11%.

Otros datos alientan más el pesimismo. Los ciudadanos españoles son los penúltimos en su grado de conocimiento de quién es el presidente de la Comisión, en sus expectativas sobre los resultados del mercado interior y en conocimiento del Tratado de Maastricht a través de los medios de información.

La encuesta ofrece otras noticias de interés. Entre las políticas europeas, la que más apoyo recibe entre los Quince es la de defensa común (78%), seguida del voto a la Eurocámara (76%), mientras que la moneda única sólo alcanza el. puesto nueve (el último) de las preferencias. La ampliación al Este es aplaudida por un 56% de los ciudadanos de la Unión.