_
_
_
_

Susan Sontag afirma, que la novela 'El amante del volcán' es su mejor libro

Rocío García

Cuando ayer por la noche Susan Sontag entró en la abarrotada Sala de Columnas del Círculo de Bellas Artes de Madrid para presentar su última novela, El amante del volcán (Alfaguara), una gran ovación inundó el escenario. Allí estaba no sólo la novelista e intelectual, sino la mujer de un compromiso eficaz, directo y valiente, como recordó su amigo y escritor Juan Goytisolo. Susan Sontag no dudó en afirmar que El amante del volcán era su mejor libro, del que se siente plenamente orgullosa.La presentación de la obra corrió a cargo de tres amigos de la autora: Juan Goytisolo, José Saramago y Vicente Molina Foix. Junto a ellos, el director de Alfaguara, Juan Cruz, para quien toda la obra de la escritora norteamericana, desde la mítica Contra la interpretación, es "un punto de referencia que nunca nos ha dejado soñar con la apatía".

Fue Juan Goytisolo, quien conoció a Sontag en Venecia hace ya casi 30 años, el único que prefirió centrarse en el perfil humano, intelectual y político de la escritora. "Ya sé que es una empresa difícil y llena de riesgo por el vasto campo que abarca Sontag", reconoció Goytisolo, quien desgranó las distintas facetas de la autora como crítica, ensayista y novelista, y sobre todo como mujer de una gran valentía y compromiso moral.

Goytisolo recordó sus viajes a Hanoi (Vietnam) "para recoger la voz del otro", su apoyo al diálogo palestino-israelí y su más reciente lucha contra el genocidio de la "ratonera humana en que se ha convertido Sarajevo".

Reflexión sobre la muerte

Saramago y Molina Foix hicieron una disección de El amante del volcán. Mientras Molina Foix se centró en la importancia del coleccionismo de historias, experiencias ajenas y vivencias propias que hace la novelista en la obra, Saramago llegó a la conclusión de que Sontag ha realizado en el libro una reflexión en torno a la muerte. "Hay a lo largo de la novela una presencia obsesiva de la muerte", dijo el escritor portugués, para quien El amante del volcán tendría que haberse titulado Contra la hipocresía. "Y es que la hipocresía es ya una forma de muerte", dijo Saramago.Susan Sontag sólo se mostró en contra del calificativo de intelectual neoyorquina con el que le habían obsequiado sus amigos. "Me veo reflejada en todo lo que han dicho sobre mi obra, pero no sobre lo de intelectual neoyorquina. No me considero una intelectual neoyorquina y no me veo ligada a la vida intelectual de Estados Unidos. Me siento ciuadana del mundo, más europea que norteamericana". Sontag, a sus 62 años, demostró anoche su potencia y belleza verbal leyendo al público que asistió a la presentación un párrafo de su libro.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_